Mas pide al PSC que apoye sus recortes para que Cataluña "no se hunda como el Costa Concordia"
- El president ha advertido de que Cataluña "no puede permitirse lujos"
- También ha insistido en la importancia del apoyo del PSC a sus medidas
- "O mantenemos el rumbo, o acabaremos como el Costa Concordia", dice Mas
El presidente catalán, Artur Mas, ha reclamado al PSC que apoye sus ajustes, ya que si Cataluña, que "vive a crédito", quiere continuar formando parte de la UE y de la zona euro, "no hay alternativa" a los recortes: "O mantenemos el rumbo o acabaremos como el Costa Concordia".
Aunque inicialmente estaba previsto que fuese el conseller de Economía, Andreu Mas-Colell, quien replicase a la oposición en el pleno extraordinario del Parlament sobre los recortes, ha sido el propio Mas quien a última hora ha decidido tomar él la palabra.
Mas ha advertido de que Cataluña en estos momentos "no se puede permitir el lujo" de detener los ajustes, porque los acreedores pueden decidir un día "cerrar el grifo" del crédito; si ocurre, "esto se hunde" y el país tendrá que ser "intervenido".
"O mantenemos el rumbo, aunque sea difícil y duro, o acabaremos como el Costa Concordia, que por despistarse se fue contra las rocas y acabó embarrancado, inclinado y panza arriba", ha alertado Mas, que ha asegurado que el pacto fiscal es "la única alternativa realmente viable para mantener el Estado del Bienestar".
“O mantenemos el rumbo, o acabaremos como el Costa Concordia“
El papel clave del PSC
"El papel del PSC en el pacto fiscal es clave", ha aseverado Mas, confiando aún en que los socialistas se sumarán a la propuesta de "soberanía fiscal" que ya suscriben CiU, ICV-EUiA y ERC.
En casi toda su intervención se ha querido dirigir directamente a la bancada socialista, en busca de un entendimiento entre los dos partidos que "de forma natural" deben alternarse en el Govern.
Mas ha ironizado sobre la "amnesia" política que parecen sufrir los socialistas cuando critican ahora los recortes en el gasto y ha pedido que sean conscientes de su parte de responsabilidad en la situación actual de las finanzas públicas.
Para desarbolar los reproches de la izquierda a sus políticas de austeridad, Mas ha hecho memoria sobre los recortes aplicados por el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, que en mayo de 2010 tuvo que dar un "golpe de timón de 180 grados" cuando Bruselas planteó la opción de intervenir la economía española si no hacía recortes.
Mas ha recriminado al PSC que presente como un "drama total" las mismas medidas que empezaron a implementar los socialistas y a las que CiU, "en una posición tremendamente incómoda", dio luz verde "a cambio de nada", poniendo el "interés de país por encima del interés de partido".