El Gobierno afirma que la decisión sobre YPF "rompe la cordialidad" con Argentina
- El Ejecutivo anunciará "medidas claras y contundentes" en los próximos días
- De Cospedal ha dicho que el Gobierno defenderá los intereses españoles
- La UE ha avisado al Gobierno argentino de que "habrá consecuencias"
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El Gobierno español ha expresado su "condena" ante la decisión "arbitraria" del Gobierno argentino de expropiar el 51% de las acciones de YPF, participada por la española Repsol. El ministro de Exteriores, José Manuel García-Margallo ha señalado que esa decisión "rompe el clima de cordialidad y amistad que tradicionalmente ha presidido las relaciones" entre ambos países, después de que el ministro Industria, Energía y Comercio, José Manuel Soria, se reuniera el pasado 28 de febrero, con representantes de Argentina, en Buenos Aires, para impulsar el diálogo.
El ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria ha asegurado que "el Gobierno de España actuará en consecuencia y desde esta misma tarde está trabajando en medidas que serán dadas a conocer a lo largo de los próximos días". Las medidas serán "adecuadas, claras y contundentes", según ha explicado.
García-Margallo ha señalado que la expropiación de YPF supone una "pésima noticia para las relaciones entre ambos países y también para la seguridad jurídica" y ha recordado la contribución que España tuvo con Argentina "en sus peores horas".
Precisamente, el titular de Exteriores ha convocado este martes en el Palacio de Santa Cruz al embajador de Argentina en España, Carlos Bettini, para abordar la decisión de Cristina Fernández. García-Margallo ya se reunió con Bettini el pasado viernes para protestar por los planes de nacionalización de YPF.
Las declaraciones de Soria y García-Margallo se producen tras una reunión con presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, en el complejo de La Moncloa para estudiar las medidas que va a tomar el Ejecutivo tras el anuncio de Argentina de expropiar el 51 % de YPF.
Cristina Fernández ha justificado la intervención de YPF en la necesidad de "recuperar la soberanía" sobre los hidrocarburos y poner fin a "una política de vaciamiento" de la petrolera, que de proseguir convertiría a Argentina, ha dicho, "en un país inviable, no por falta de recursos, sino por políticas empresariales".
Medida "discriminatoria"
Soria ha calificado la decisión del Gobierno argentina como "discriminatoria" respecto a otros operadores petroleros "porque se anuncia una ley de nacionalización del sector, pero solo se adoptan medias en relación a una empresa", ha señalado, de la que Repsol es "legítima propietaria".
Además, el titular de Industria considera que la expropiación también es discriminatoria respecto a los accionistas de Repsol, porque "no dice nada del resto del accionariado". El ministro de Exteriores ha coincidido en señalar que la medida "penaliza" al accionariado de la compañía.
Esta "arbitraria decisión quiebra el clima de confianza necesario que Argentina necesita para salir de la situación en la que se encuentra", ha asegurado el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, en referencia a las inversiones de empresas extranjeras en ese país.
Fuentes del Gobierno a las que cita Efe han insistido en que se buscará dar una respuesta adecuada a los intereses de España en este asunto, y se han remitido a las palabras del presidente durante un acto organizado por el Instituto de Empresa Familiar. "Allí donde haya una empresa española, allí estará el Gobierno defendiendo como propios sus intereses", ha subrayado Rajoy.
Después de conocerse la noticia, el secretario de Estado de Cooperación Internacional y para Iberoamérica, Jesús Gracia, ha apuntado en el Congreso que la expropiación supone "una decisión muy personal del Gobierno argentino".
La secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, ha dicho que el Gobierno defenderá los intereses de España y el líder del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha manifestado que apoyará tanto al Gobierno como a Repsol.