Iberia usará la reforma laboral para cambiar condiciones del convenio colectivo de pilotos

• La compañía alega que hay causas objetivas para llamar al 'descuelgue'
• Sindicatos y empresa se han reunido sin lograr un acercamiento de posturas
• Pastor: "Mejor un mal acuerdo que un buen laudo"

Iberia ha comunicado este lunes al sindicato de pilotos Sepla la necesidad de proceder a la inaplicación de determinadas condiciones del VII convenio colectivo de pilotos "por causas de carácter productivo, económico y organizativo". La aerolínea ha explicado que esta decisión, llamada 'descuelgue', se enmarca en lo establecido por la reforma laboral, recientemente aprobada por el Gobierno y convalidada en el Congreso.

Como las medidas afectan a más del  10% de la plantilla, a través de una carta enviada la aerolínea ha  comunicado la apertura de un periodo de consultas previo, tal y como marca la ley, que establece que las empresas que acumulen seis meses consecutivos  de caída de ingresos o ventas pueden modificar las condiciones del  convenio colectivo.

Por ello, la compañía convoca a los representantes sindicales a una reunión este martes, en la que la compañía trasladará al sindicato de pilotos las causas que justifican la decisión tomada y les entregará la documentación pertinente.

Los pilotos han solicitado un aplazamiento de la reunión por no  tener las garantías sindicales necesarias y no estar todos los  representantes de los pilotos por estar alguno volando.

Reunión sin acercamiento

Este lunes, día en el que tiene lugar una nueva jornada de huelga de los pilotos, Iberia y el Sepla mantienen sus posturas  enfrentadas pese al llamamiento que ha hecho la ministra de Fomento, Ana  Pastor, que les ha convocado a la sede ministerial este lunes para buscar una solución al conflicto que mantienen desde hace meses.

Tras el encuentro, Pastor ha destacado que deben acercar posturas las dos partes y que de no hacerlo tendrá que intervenir el ministerio, aunque ha afirmado que es "mejor un mal acuerdo que un buen laudo".

Pastor ha señalado que para evitar ese "laudo" se ha pedido a las dos partes que lleven a cabo un acercamiento de posturas y ha añadido que desde Fomento se piensa que es mejor llegar a acuerdos que tener que actuar por la vía de los arbitrajes forzosos.

Para la ministra, el acuerdo debe cerrarse en "un corto espacio de tiempo", aunque lo más importante, a su juicio, es que se produzca el entendimiento entre la empresa y los pilotos. En la reunión entre las dos partes y el ministerio se ha acordado la remisión de un documento por parte de Iberia a Fomento donde se expongan los puntos de discrepancia que tiene la línea aérea con sus trabajadores, y en el momento en que les llegue, ha dicho, lo enviarán a los pilotos para que les den "su parecer".

"Se actuará en consecuencia"

La ministra ha destacado que tras escuchar a las dos partes,  se tomará una decisión y "se actuará en consecuencia", aunque ha insistido en que espera un acercamiento entre las dos partes, y que a través de ese documento se "pueda cerrar el asunto".

Durante la reunión, según ha explicado Pastor, se ha vuelto a decir a las partes que sería bueno para todos ese acuerdo, porque en este momento "en el que todos debemos arrimar el hombro", es un mal mensaje para los viajeros que una compañía tan importante tenga a sus pilotos en una huelga permanente.

La ministra ha recordado que Fomento es el órgano regulador y que además es quien debe garantizar la libre circulación de los ciudadanos, y que por eso está interviniendo, para que "la vida ordinaria de la gente no se vea alterada".

Los pilotos han pedido que se acuda a un arbitraje "obligatorio", porque a juicio del portavoz del Sepla-Iberia, Justo Peral, la empresa se está negando a llegar a un acuerdo voluntario para poner fin al conflicto.

La respuesta de Iberia ha sido la comunicación sobre el convenio colectivo de los pilotos. Desde la compañía se ha afirmado que la postura de los pilotos amenaza el futuro de la empresa por ser una huelga "abusiva" y ha acusado a este colectivo de mantener una baja productividad y un alto coste salarial.