El obispo de Alcalá, que será denunciado ante la Fiscalía, reitera su visión sobre la homosexualidad
- Asegura que una terapia "apropiada" puede resolver la homosexualidad
- La Federación de lesbianas y gais le denunciará por provocar discriminación
- Levantó una gran polémica tras hablar de los homosexuales en una misa
La Federación Estatal de Lesbianas, Gais, Transexuales y Bisexuales y la coordinadora en Madrid de este movimiento denunciarán ante la Fiscalía de Madrid al obispo de Alcalá, Juan Antonio Reig Plá, por provocación a la discriminación y al odio en su homilía del Viernes Santo, que emitió en directo La 2 de RTVE.
En la misa de esa mañana el prelado "relacionaba la homosexualidad con la corrupción, la prostitución y el abuso, anteponiendo el perjuicio a la diversidad afectiva y sexual", es decir, cometiendo el citado delito, dice también la nota.
La FELGTB informa además en su nota de que ha solicitado que se investigue si RTVE "ha incurrido en falta" al emitir las palabras del prelado y también que ha pedido que la Corporación retire de su web las palabras del obispo que emitió.
Con esta intención ha presentado ante el Consejo de RTVE, antes de "su reunión del pasado miércoles" (durante la cual los consejeros pidieron explicaciones a la Conferencia Episcopal) una queja que ha enviado también a la Defensora del espectador de la Corporación y a la Defensora del Pueblo.
El obispo reitera su visión sobre la homosexualidad
El obispo de Alcalá de Henares ha defendido que muchos casos de personas que sienten atracción hacia otras del mismo sexo "pueden ser resueltos positivamente, con una terapia apropiada, especialmente si la práctica de actos homosexuales no se han enraizado".
En una entrevista a 'Religión en Libertad', la primera que concede tras la polémica homilía de Viernes Santo, Reig Pla ha respondido positivamente a la posibilidad de cambio en las personas gays. "Según la fe cristiana, la redención, la salvación, no es simplemente un dato de hecho. Se nos ofrece la salvación en el sentido de que se nos ha dado la esperanza, una esperanza fiable, gracias a la cual podemos afrontar nuestro presente", ha recalcado.
"Con la ayuda de la gracia de Dios y acompañados por sacerdotes, orientadores y catequistas y ayudados, en su caso, por profesionales, las personas con orientación sexual hacia el mismo sexo pueden vivir en castidad (dominio de sí); no sin combate, pero la vida de todo cristiano que quiere vivir según la voluntad de Dios implica batallar contra las propias concupiscencias hasta el mismo día de la muerte", ha agregado.
En este punto, el obispo complutense ha recordado que el Pontificio Consejo para la Familia indicó que "los padres cuando advierten en sus hijos, en edad infantil o en la adolescencia, alguna manifestación de dicha tendencia o de tales comportamientos, deben buscar la ayuda de personas expertas y calificadas para proporcionarle todo el apoyo posible", y añade: "muchos casos, especialmente si la práctica de actos homosexuales no se ha enraizado, pueden ser resueltos positivamente con una terapia apropiada".
Las experiencias son "muy esperanzadoras"
A este respecto, ha asegurado que las experiencias de las que tiene noticias, especialmente en España, Europa, Estados Unidos y Latinoamérica "son muy esperanzadoras". "Con la pertinente unión de la ayuda espiritual y profesional, muchas personas, laicos, religiosos y sacerdotes, que voluntariamente lo han solicitado, se están viendo beneficiados por estos nuevos itinerarios de libertad, caridad, verdad y esperanza que conducen al dominio de sí y, en su caso, al cambio", ha revelado.
Eso sí, Reig Pla ha aclarado que no se trata de imponer nada, sino de "ofrecer el espacio de libertad, verdad y esperanza que otorga la Iglesia para quien libremente desee escapar de la dictadura del silencio". "Sabemos que hablar de castidad como dominio sobre la propia persona, e incluso de cambio para volver a la orientación sexual varón-mujer, no es políticamente correcto; desde luego los católicos, y yo en particular, bajo ningún concepto queremos ofender a nadie, sin embargo no renunciamos a anunciar la verdad en la caridad", ha remarcado.
Inclinación "objetiva desordenada"
Reig Pla ha afirmado que lo que explicó el Viernes Santo responde al magisterio de la Iglesia Católica, ya que esta "enseña que hay que distinguir entre las personas que siente inclinación sexual hacia el mismo sexo, la inclinación sexual propiamente dicha y los actos homosexuales".
"Respecto a las personas con atracción sexual hacia el mismo sexo la Iglesia enseña que deben ser acogidos con respeto, compasión y delicadeza. Se evitará, respecto a ellos, todo signo de discriminación injusta", ha destacado.
"Más aún, la Iglesia acoge a todos los que, en esta situación, se acercan solicitando ayuda. Otra cosa bien distinta es la inclinación propiamente dicha (objetivamente desordenada) y los actos homosexuales (intrínsecamente desordenados)", ha añadido.
Sin embargo, en lo que se refiere a la inclinación de dichas personas, "aunque en sí no sea pecado, constituye sin embargo una tendencia, más o menos fuerte, hacia un comportamiento intrínsecamente malo desde el punto de vista moral y este motivo la inclinación misma debe ser considerada como objetivamente desordenada".