Aguirre amenaza con "insumisión" al Ministerio de Educación si no deja contratar profesores nativos
- Quiere a nativos para dar clases en los colegios públicos bilingües
- Considera "alucinante" una respuesta negativa del ministerio
La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, ha apuntado este viernes su intención "de pasar a la insumisión" si el Ministerio de Educación y Cultura rechaza su pretensión de contratar profesores nativos para impartir enseñanzas en los colegios públicos e institutos bilingües madrileños.
Aguirre ha asistido al congreso organizado por la Asociación de Centros Autónomos de Enseñanza Privada (Acade), donde se ha referido a su pretensión, expuesta públicamente en varias ocasiones, de que se puedan contratar a profesores de otros países para los centros de enseñanza públicos madrileños.
En su intervención, la presidenta madrileña ha dejado entrever que la respuesta del Ministerio a su pretensión es negativa: "me parece alucinante. Esto no ocurre en ningún otro país. ¿No se supone que la UE garantiza la libre circulación de los trabajadores por los países de la Unión?".
En esta línea, ha añadido: "La verdad, creo que vamos a pasar a la insumisión porque esto no puede ser".
Un funcionario que "pone pegas"
Fuentes de la Consejería de Educación han dicho que el que ha preparado la respuesta del Ministerio a la petición de Madrid ha sido un alto funcionario que trabajó en ese departamento del Gobierno regional.
Aguirre ha indicado que ese funcionario del Ministerio "ya ponía pegas" a la idea de contratar profesores nativos cuando estaba en la Consejería de Educación madrileña y que "por eso salió" de ella.
Las mismas fuentes le han identificado como Xavier Gisbert, que fue director general de Mejora de la Calidad de la Enseñanza de la Consejería de Educación y ahora está en el Ministerio.
En la apertura del congreso ha intervenido además el presidente de Acade, Jesús Núñez, a quien Aguirre ha animado a que empiece con esa "insumisión" cuando ha conocido que los centros privados también tienen impedimentos para contratar profesores nativos, lo que "ha dejado sin habla" a la presidenta, según ella misma ha confesado.