Sant Jordi, laborable pero una gran fiesta
- Este Sant Jordi se espera vender hasta 7 millones de rosas
- La producción en Catalunya es insuficiente y se importa de Holanda y Sudamérica
- El clásico Barcelona-Madrid ha incrementado el número de rosas de colores azulgrana
Las floristerías esperan vender este año siete millones de rosas. Son optimistas: si se cumple esta previsón, será aproximadamente un 20% más que el año pasado, cuando la fecha cayó en semana santa.
Este día, el 23 de abril, es en Catalunya el día de los enamorados. Según la tradición, Sant Jordi mató al dragón que mantenía cautiva a la princesa y de la sangre brotó una rosa.
Así que las parejas intercambian regalos: el libro para él, la rosa para ella. Puede que alguna pareja no compre un libro, pero si no hay rosa... es una tácita declaración de que algo va mal.
Las rosas que se cultivan en Catalunya no son suficientes, porque muchos tienen la tradición de regalarlas a sus hijas, madres, hermanas o amigas, e incluso a compañeras en centros de trabajo. Además, muchos comercios y supermercados agradecen este día las compras con una rosa, e incluso entidades municipales hacen buen acopio para regalarlas.
“muchos tienen la costumbre de regalar rosas también a sus hijas, madres, hermanas... “
Miles de alumnos de universidades y escuelas venden también rosas en tenderetes por las calles de pueblos y ciudades, y así se ganan un dinerito para su viaje de fin de curso.
Los viveros catalanes: insuficientes
El Mercado de Flor y Planta Ornamental de Catalunya es un gran centro mayorista que agrupa a productores y distribuidores del Maresme y sirve a más de 5.000 compradores. Hace ya muchos días que han vendido ya toda la producción local, que calculan en el 15% de rosas.
La venta ha ido bajando desde el 2007, según el presidente de este mercado, Jordi Rodon. Pero se muestra confiado porque considera "asumible" el gasto por una flor. "Más allá de su coste económico, la rosa tiene un valor simbólico innegable este día, más que en cualquier otro”.
“la rosa tiene un valor simbólico innegable,más que cualquier otro día“
Jaume Esteve, director del gran centro de distribución Mercabarna-flor, que abastece el 40% de floristerías por Sant Jordi, explica que los grandes cultivos de rosas en Catalunya se pueden contar con los dedos de una mano. Esteve es aún más pesimista y tasa en el 10% las rosas nacionales.
En Mercabarna-flor, las rosas de Colombia son ya el 35%, y las de Ecuador, el 20%. Estos países han superado a Holanda, donde las condiciones climatológicas son las que son y deben mantener los cultivos en grandes invernaderos.
Las de Holanda han pasado de representar el 70% de las rosas de Sant Jordi a tan solo el 35%.
Además, de algunos proveedores de Sudamérica llega el producto listo para la venta en cajas con las rosas ya adornadas: ¡incluso con la senyera -la bandera catalana!
Este año, todavía más ilusión por Sant Jordi
Joaquim Ros, director de mercados de Mercabarna, donde está Mercabarna-flor, dice que la festividad del año pasado fue "tétrica: cayó en Sábado Santo y llovió",y que por eso "este año hay ilusión por Sant Jordi.
Como cada año, se venderan sobre todo rosas rojas: el 70% del total. Aunque nunca mejor dicho, para gustos los colores. Por las calles de todoas los pueblos y ciudades catalanes se pueden encontrar miles de rosas blancas, amarillas, rojas, rosas, naranjas...
La novedad de este año es la Red Naomi, con pétalos de aspecto fino y tacto aterciopelado, tallo grueso y grande: solo el botón -la flor cerrada- mide entre 9 y 14 centímetros.
Otra variedad, no tan sorprendente, es la llamada Freedom. Es más pequeña pero su precio mucho más asequible favorecerá las ventas.
El precio final no variará respecto al año pasado, según Jaume Esteve "está demostrado que la crisis aquí no juega. Lo más importante es si la Diada cae en laborable -que es cuando se vende más- y sobretodo si hace buen tiempo".
Una rosa de Sant Jordi puede comprarse por sólo 3 euros. Pero si queremos que la flor nos acompañe varios días y tenga buen aspecto no deberíamos gastar menos de 6 euros. El precio también aumenta por flor si lleva un adorno elaborado.
Las rosas de Sant Jordi se entregan siempre con la senyera, la cinta con los colores de la bandera catalana, puesto que es una de las fiestas reivindicativas de la tradición. Además, se incluye una espiga de trigo porque así se simboliza la fertilidad.
Dos días después del clásico: rosas azulgrana
No son nuevas y se venden muy bien: con los colores del Futbol Club Barcelona, las rosas azulgranas salen también a las calles. Pero este año hay más: los comerciantes aprovechan la cercanía de la fecha del clásico Barça-Madrid y hacen un guiño a los aficionados.
También se pueden encontrar rosas blancas y azules, para los aficionados del Espanyol, el segundo equipo de la ciudad.
El día de Sant Jordi el color y la sensación de fiesta -a pesar ser laborable- llena siempre las calles de toda Catalunya. No únicamente las Ramblas de Barcelona, pero sí es ese paseo, donde se encuentran diversos puestos de venta de flores, donde se dan imágenes que dan la vuelta al mundo.
Los turistas que estos días ya inundan la ciudad se suman a la tradición y no dudan en comprar rosas. Es una de esas fiestas que muchos programan para viajar a Catalunya. Los que no estaban avisados, se maravillan.