Romney espera sellar su nominación en las primarias de este martes
- Se celebran en Pensilvania, Nueva York, Conecticut, Delaware y Rhode Island
- Romney podría lograr matemáticamente la nominación republicana
- Gingrich se plantea retirarse en función de los resultados de esta noche
Las esperadas victorias de Mitt Romney en los cinco estados de Estados Unidos que celebran primarias este martes podrían otorgarle este martes los delegados necesarios para convertirse, matemáticamente, en el nominado republicano a las presidenciales y centrar así su campaña en la pugna por la Casa Blanca con el presidente Barack Obama.
Los dos bandos ya se han enfrentado duramente y la disputa sólo se acrecentará en los próximos seis meses de campaña hasta que el 6 de noviembre los estadounidenses decidan si quieren otros cuatro años de Obama o un nuevo líder.
Dos semanas después de que su principal rival en la carrera republicana, Rick Santorum, anunciara que suspendía su campaña, Romney encara la cita con la firmeza de tener casi asegurados la gran mayoría de los 231 delegados que se repartirán entre los cinco estados que han convocado primarias: Pensilvania, Nueva York, Conecticut, Delaware y Rhode Island, según informa Reuters.
De los estados que votan el martes, Nueva York será el que repartirá más delegados, con un total de 95, seguido de Pensilvania, con 72; Connecticut, con 28; Rhode Island con 19, y Delaware con 17.
Esperada victoria
Los triunfos esperados serán un fuerte impulso, casi definitivo, para Romney en la carrera por los 1.144 delegados que designarán oficialmente al nominado republicano dentro de unas semanas. Este martes, Romney podría superar los 800 delegados con los 200 que están en juego el martes. Sus únicos rivales son Newt Gingrich y Ron Paul, ambos muy rezagados en las encuestas y en el conteo de apoyos del partido.
Por su parte, Gingrich ha manifestado a la cadena NBC News que podría reconsiderar su candidatura en función de resultado en Delaware, uno de los cinco estados del noreste que sostienen las primarias presidenciales, y el estado donde Gingrich ha hecho campaña más fuertemente.
"Creo que tenemos que tener una mirada profunda en lo que estamos haciendo", ha dicho Gingrich en una entrevista.
Romney cuenta hasta ahora con 659 de los 1.144 delegados necesarios para asegurarse la nominación republicana, que se anunciará en la Convención Nacional de agosto en Tampa (Florida).
Romney, un moderado ex gobernador de Massachusetts, podría entrar en la campaña por la elección general golpeado por una amarga batalla en las primarias, en la que enfrentó a un grupo de competidores que pusieron en duda la autenticidad de sus creencias conservadoras.
"Necesito su ayuda el 6 de noviembre", dijo a seguidores en South Park Township, en las afueras de Pittsburgh, el lunes. "Súmense a nosotros en este esfuerzo", agregó.
La incognita del vicepresidente
Romney remató este lunes su campaña al comparecer con el senador Marco Rubio, uno de los nombres que más suenan como su posible compañero de candidatura. Preguntado por los periodistas, Romney insistió en que la búsqueda de un compañero de carrera "aún está en su etapa más temprana".
Romney ha designado a su asesora Beth Myers como coordinadora del proceso de selección de candidatos a vicepresidente, y ella "ha empezado a compilar algunos de los nombres y los criterios que podrían asociarse con ese proceso", según explicó el aspirante.
"Pero la verdad es que no hemos tenido aún ninguna conversación sobre hacer una lista o evaluar a varios candidatos en concreto", añadió Romney.
Las lagunas de Romney
Tiene que resolver varios temas de inmediato. Por un lado, consolidar el apoyo conservador y empezar a tomar medidas para atraer a los votantes independientes, que seguramente serán los que decidan la elección. Por el otro, debe lidiar con un déficit de respaldo entre las mujeres, los hispanos y los jóvenes.
También está construyendo un equipo mucho más grande con miras a la elección general, luego de confiar durante meses en un pequeño círculo de asesores leales. Además, está buscando un compañero de fórmula para el puesto de vicepresidente.