El abogado de Matas dice que la subasta de sus pisos se paraliza por acuerdo con el banco

• Tres inmuebles servían para avalar la fianza del Palma Arena
• La entidad acreedora es el Banco de Valencia
• Este martes, el expresidente balear intentó parar la subasta

Jaume Matas logra paralizar la subasta de tres inmuebles de su propiedad

La subasta señalada este miércoles de los tres inmuebles con los que el expresidente balear Jaume Matas avaló su fianza de tres millones de euros por el caso Palma Arena se suspenderá tras alcanzarse un acuerdo con el acreedor, el Banco de Valencia, según ha asegurado su abogado Antonio Alberca.

La Audiencia Provincial de Palma aceptó este martes sustituir la fianza de medio millón de euros que pesa sobre el expresidente balear Jaume Matas por el caso Palma Arena por dos de los pisos que se subastan para ejecutar un embargo por impago del préstamo que pidió a la entidad valenciana para poder seguir en libertad.

A lo largo de la jornada de este martes Matas intentó por varias vías la paralización de la subasta de sus bienes, entre ellos el llamado "palacete", para lo cual ha llegado a solicitar un concurso personal de acreedores porque dice que no puede pagar los intereses de un millón de euros que debe.

Pese a sus peticiones, el Juzgado de Primera Instancia número 10 de Palma ha mantenido para las 10.30 horas de este miércoles la subasta de los tres inmuebles de Matas, que este martes no tenían postor, ya que nadie había depositado una fianza con el 20 % de su valor, lo que es necesario para poder participar en el proceso.

Matas hipotecó tres inmuebles para pagar la fianza

Matas hipotecó tres inmuebles para obtener un préstamo de 3 millones de euros con el que pagar la fianza que le impuso el juez del caso Palma Arena, caución que finalmente quedó en 2,5 millones y que a mediados de este mes fue retirada, aunque se le impuso otra fianza civil ligada a la condena de 6 años de cárcel por corrupción que ha recurrido al Tribunal Supremo.

Según ha informado a EFE su abogado, Antonio Alberca, el expresidente logró que la Audiencia de Palma le entregara el medio millón de euros que había pagado de fianza depositando como garantía los títulos de propiedad de un local comercial de la calle Sant Miquel de Palma, valorado en 900.000 euros, y el piso de la casa nobiliaria de la calle Sant Feliu de Palma conocido como el "palacete", que está tasado en 1.650.000 euros.

Matas ha pactado con el Banco de Valencia entregarle los 500.000 euros recuperados de la fianza y un piso heredado de su familia, situado en las Ramblas de los Duques de Palma, valorado en 450.000 euros.

Con esta operación "triangular", ha dicho el letrado, se salda la deuda contraída por Matas con el Banco de Valencia, sujeta a unos intereses mensuales del 29 %.

Las partes han comunicado este pacto al juzgado de primera instancia número 10 de Palma y han solicitado la suspensión de la subasta, que finalmente sí había despertado el interés de algún postor, han indicado fuentes jurídicas.

Según el acta levantada por el juzgado, el acuerdo suspende la ejecución del procedimiento hipotecario.

Anulada la solicitud de concurso de acreedores

Por otro lado, el representante legal de Matas ha anulado la solicitud de concurso de acreedores planteada por su cliente para tratar de detener la subasta porque el pacto alcanzado con el banco deja sin efecto la amenaza de insolvencia.

Además, Alberca ha precisado que las dos propiedades que el exministro ha depositado como garantía ante la Audiencia provincial, que le condenó por la primera pieza juzgada del caso Palma Arena, "le serán devueltas" tanto si el Supremo ratifica la condena como si le absuelve, puesto que su función es asegurar que Matas cumple las medidas cautelares, no cubrir responsabilidades civiles.

El letrado ha subrayado que el acuerdo con el Banco de Valencia tendrá que ser detallado una vez se realice una tasación más precisa del inmueble que se le ha entregado y ha considerado abusivos los intereses aplicados por la entidad financiera.

Matas, que gobernó en Baleares de 1996 a 1999 y de 2003 a 2007 y fue ministro de Medio Ambiente entre 2000 y 2003, es el cuarto presidente autonómico condenado por corrupción y de las 26 piezas en las que está dividido el caso Palma Arena será juzgado en una veintena más.