La Haya declara culpable al expresidente de Liberia de crímenes de guerra
- La lista de atrocidades de Taylor abarca desde asesinatos a violaciones
- Más de 100.000 víctimas dejó el conflicto de Sierra Leona (1991-2002)
- Es la primera vez que La Haya dicta sentencia contra un exjefe de Estado
El Tribunal Especial para Sierra Leona (TESL) ha declarado culpable de crímenes de guerra y lesa humanidad al ex presidente liberiano Charles Taylor, el primer jefe de Estado africano que ser declarado culpable por un tribunal internacional. También es la primera condena de este tipo contra un ex jefe de Estado desde la Segunda Guerra Mundial y los juicios de Nuremberg.
Tras una hora y cuarenta minutos de lectura del veredicto, el juez Richard Lussick ha dictado sentencia contra Taylor por los crímenes cometidos durante la guerra civil en Sierra Leona (1991-2002). El conflicto que asoló el país africano durante más de una década generó más de 100.000 víctimas, entre ellas multitud de mutilados, y causó unos 50.000 muertos.
El ex mandatario africano ha sido considerado "penalmente responsable" de "instigar" y "ayudar" a la comisión de once delitos, tras más de un año de deliberaciones desde que el juicio quedó visto para sentencia en marzo de 2011. Su lista de atrocidades van desde asesinatos, actos de terrorismo y violaciones hasta esclavismo y uso de niños soldados.
Sin embargo, aún habrá que esperar hasta el próximo 30 de mayo para saber la pena que se aplicará Taylor. El Tribunal no prevé en sus estatutos la pena de cadena perpetua, pero sí el encarcelamiento de larga duración y sin limite previsto.
Taylor, vestido con un traje azul oscuro, corbata granate y en apariencia tranquilo, ha recibido de pie el veredicto del tribunal.
Supermodelos y diamantes de sangre
Los jueces han considerado que Taylor es "responsable" de los crímenes porque ayudó a las fuerzas rebeldes de Sierra Leona (RUF) con apoyo logístico, moral y de armas, pero han rechazado que tuviera responsabilidad de mando o formase parte de una "empresa criminal" en la que también estaban implicados los líderes rebeldes de Sierra Leona. Eso sí, han asegurado que el acusado facilitó una base en Monrovia para que los rebeldes pudieran transferir armas y diamente al RUF.
El proceso contra Taylor, que se ha prolongado casi cinco años, ha cobrado especial notoriedad debido a la presunta relación del ex presidente con los conocidos como "diamantes de sangre", que recibió de manos del RUF de Sierra Leona a cambio de facilitarles armas.
El juicio generó una gran expectación durante la declaración de la afamada modelo Naomi Campbell en agosto de 2010, a quien el dictador supuestamente habría regalado estas piedras preciosas, extraídas en Sierra Leona por esclavos, muchos de ellos niños.
Taylor, de 64 años, ha sido acusado de dirigir a las fuerzas del RUF en una "campaña de terror" para saquear las minas de diamantes de Sierra Leona, comerciar con armas y atemorizar a la población. Sin embargo, el exmandatorio africano ha negado las acusaciones, insistiendo en que trató de llevar la paz a la región y asegurando que su juicio es una conspiración política de las potencias occidentales.
Con las declaraciones de Campbell, así como con las de su ex agente Carol White y la actriz Mia Farrow, la Fiscalía ha intentado demostrar a los jueces que Taylor mentía cuando afirmó durante el juicio que nunca había tenido en sus manos diamantes en bruto.