El Gobierno liberalizará infraestructuras y servicios de transporte este viernes
- Apunta que se trata de crear una gestión más eficiente y más económica
- Ministro de Economía: hay que pasar de la economía del ladrillo al conocimiento
La vicepresidenta del Gobierno español, Soraya Sáenz de Santamaría, ha anunciado este lunes que el Ejecutivo seguirá con las reformas para "la liberalización de determinados servicios". Aunque se ha mostrado muy escueta sobre ese asunto, ante la insistencia de los periodistas, ha apuntado a la privatización de "determinadas infraestructuras, determinados servicios de transporte", para que "sean mucho más económicos para los ciudadanos".
En ese sentido, Sáenz de Santamaría ha apuntado que "este viernes" el Gobierno "seguirá con las reformas para la liberalización de determinados servicios, para volver a crear una gestión mucho más eficiente, y lo que es mejor, más austera y económica para los ciudadanos".
Sáenz de Santamaría ha realizado este anuncio antes de intervenir en Santiago de Compostela en una reunión organizada por la Fundación Konrad Adenauer en la que participan también los ministros de Economía, Luis de Guindos, y de Asuntos Exteriores, José Manuel García Margallo, así como el ministro alemán de Finanzas, Wolfgang Schäuble, y el presidente del Parlamento germano, Norbert Lammert.
"Seguiremos con las reformas para la liberalización de determinados servicios, tal y como señaló el Gobierno", ha comentado la vicepresidenta.
"Una gestión austera que se dedique a lo importante"
Además, ha reiterado que se trata de "un programa de reforma completo para la modernización del país" y ha apuntado que "ahora toca seguir aquellos cambios que son imprescindibles para volver a crecer y crear empleo".
En un breve encuentro con los periodistas, la vicepresidenta ha incidido en la necesidad de "modernizar el conjunto del país, de las Administraciones Públicas, y de los distintos mercados para que España pueda salir reforzada de la crisis y crear empleo".
Ha confesado que es "una tarea difícil y complicada", pero ha garantizado que los ciudadanos pueden confiar "en que aquí hay un gobierno con la determinación y los apoyos necesarios para llevar a cabo viernes tras viernes las distintas reformas que pongan a punto nuestro país".
Sáenz de Santamaría ha añadido que, "en el pasado, se ha perdido mucho tiempo y dinero" y que ahora "es el momento de modernizar, de simplificar, de permitir que una gestión austera se dedique a lo importante, poner en marcha reformas que permitan el crecimiento, que permitan la inversión, que permitan que las pequeñas y medianas empresas vuelvan a respirar con futuro".
I+D+i, "uno de los núcleos básicos de la política del Gobierno"
Por su parte, el ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, ha asegurado que el Gobierno "está tomando todas las decisiones para modificar el rumbo" de la economía.
De Guindos, que ha asistido a la presentación del programa Innova Saúde junto al presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, ha señalado que "existen focos de inestabilidad importante en la economía española e incertidumbre en la economía mundial", y que España "se enfrenta a una serie de problemas y desequilibrios notables".
Por ello, ha señalado que es necesario "recuperar la confianza y la credibilidad", volver a la senda del crecimiento y a la creación de empleo, y enfocar la economía -hasta ahora muy dependiente "del ladrillo"- hacia otra economía "mucho más basada en el conocimiento".
Así, ha hecho hincapié en la importancia del I+D+i, "uno de los núcleos básicos de lo que va a ser la estrategia de política económica del Gobierno". "El I+D+i, lo que es la ciencia, lo que es la tecnología, tiene necesariamente que acabar dando sus frutos en términos de crecimiento y frutos en términos de competitividad", ha subrayado.
El ministro se ha referido también al efecto de la crisis en el mercado de trabajo y ha indicado que en ninguna economía de nuestro entorno se ha perdido más del 10% del empleo privado ni la tasa de paro ha crecido tanto hasta pasar del 8% al 23%, tal y como ha pasado en España.
"No ha habido ningún otro país de la OCDE ni, por supuesto, de la UE, ni siquiera los países rescatados, en los cuales se haya vivido un deterioro tan importante como el que se está viviendo en España en el mercado laboral", ha afirmado.
De Guindos ha indicado que el exceso de endeudamiento, "muy concentrado en empresas inmobiliarias y constructoras", ha obligado también a tener que recurrir a los mercados internacionales para buscar financiación, en cifras que han supuesto casi el 90% del PIB (900.000 millones de euros).
Ha añadido que otro de los efectos de los desequilibrios económicos se ha hecho notar en las cuentas públicas. "El año pasado España incumplió sus compromisos con nuestros socios comunitarios, y en vez de un déficit del 6% tuvimos un exceso sobre ese porcentaje de más de 27.000 millones de euros que nos llevó a un déficit del 8,5% que tenemos que ir corrigiendo", ha indicado.
"Eso no fue solo consecuencia de la crisis, sino también de los errores que se cometieron en el pasado en la política económica. Decisiones erróneas de lo que es la política fiscal y presupuestaria", ha subrayado De Guindos.
La política económica del Gobierno va dirigida a corregir "esos desequilibrios", ha señalado el titular de Economía y Competitividad.
Y en esta línea, ha explicado que "la espina dorsal, el núcleo fundamental de la política económica" es lo que el pasado viernes ha aprobado el Consejo de Ministros y que se basa en los programas de estabilidad y de reformas.