Concentraciones en 48 ciudades para denunciar el "difícil momento" del periodismo
- La FAPE reivindica en un manifiesto que "sin periodistas no hay periodismo"
- Medio millar periodistas se concentra en Madrid contra la crisis en el sector
- Muchas caras conocidas de los medios han acudido al acto denuncia
El día Mundial de la Libertad de Prensa, la Federación de Asociaciones de Periodistas de España ha concentrado en 48 ciudades españolas a cientos de periodistas bajo el lema "Sin periodistas no hay periodismo. Sin periodismo no hay democracia".
En Madrid, la explanada del Museo de Arte Público bajo el puente de Juan Bravo, ha sido el escenario de la reivindicación de la profesión en un momento delicada de la misma. En los últimos cuatro años se han perdido más de 6.000 empleos y cierre masivo de medios.
Muchas caras conocidas de la prensa escrita, televisión y radio han asistido al acto, para apoyar al periodismo en un momento crucial de su historia.
Reconocidos informadores como Iñaki Gabilondo, José María García, Fernando González Urbaneja, Pepa Bueno, Angeles Barceló o Juan Luis Cano se han mezclado con cientos de caras anónimas que cada día contribuyen al funcionamiento de los medios de comunicación.
En un pequeño escenario custodiado por un cielo gris oscuro, la presidenta de la FAPE, Elsa González, -junto a la presidenta de la Prensa de Madrid (APM), Carmen del Riego, y el coordinador general de IU, Cayo Lara- ha leído un manifiesto en el que se ha denunciado "la difícil situación" que atraviesa el periodismo.
Actualmente, la profesión vive las peores cifras de paro de su historia. Según un informe de la FAPE, desde 2008 se han destruido 6.234 puestos de trabajo, se han cerrado 57 medios de comunicación y se han realizado 23 Expedientes de Regulación de Empleo.
En el manifiesto, leído a las doce del mediodía en 48 concentraciones similares celebradas en otras tantas ciudades españolas, se recuerda que la mejor manera de fortalecer la libertad de prensa es el ejercicio responsable del periodismo por los periodistas y editores, y se ha recordado que la misma se debilita cuando el periodismo se convierte en una "fuente de manipulación".
No se pierde la esperanza
Ante este paisaje tan desolador se encuentran miles de periodistas y recién licenciados que no logran encontrar una oportunidad para desarrollar su profesión.
Es el caso de Ricardo Salinas, tiene 23 años y se ha licenciado hace dos meses. Ha hecho prácticas en varios medios, pero actualmente está buscando trabajo.
"Las expectativas no son buenas, viendo todos los despidos y cierres de medios que hay, pero no pierdo la esperanza de trabajar de esto. Espero poder devolver el esfuerzo que le ha costado a mi familia una carrera de cinco años", resalta el joven periodista.
“No pierdo la esperanza de trabajar de esto“
No solo han asistido al acto periodistas, también ha apoyado la denuncia jóvenes estudiantes que esperan trabajar de lo suyo en un futuro que califican de "negro".
Rebeca, Elena y María son tres estudiantes de primero de periodismo de la Universidad Complutense de Madrid, que no renuncian a ganarse la vida de lo que consideran su vocación, aunque lo ven complicado.
"Es nuestra ilusión y algún día esperamos trabajar de esto. Sabemos que es difícil y más contemplando el panorama actual. Además, si le sumas el instrusismo, la cosa pinta peor", dice una de las jóvenes con resignación.
Un momento de cambio
Para algunos veteranos de la profesión como Iñaki Gabilondo, el periodismo esta viviendo el final de un modelo y el comienzo de otro, que todavía "no acaba de nacer".
"No se sabe muy bien hacia dónde vamos, estamos en el centro de un terremoto. Está muriendo la estructura actual y no acaba de nacer el siguiente", manifiesta el veterano periodista, que si ve futuro más allá de la actual situación por la que pasa el periodismo.
“Estamos en el centro de un terremoto“
En la misma línea, se ha pronunciado el expresidente de la Prensa de Madrid, Fernando González Urbaneja, que destaca el momento de transición al que asiste el llamado cuarto poder y la importancia de las generaciones venideras en el desarrollo del nuevo modelo, que "está por definir".
Mientras, José María García ha destacado que la profesión vive en España la peor crisis con mucha diferencia en lo que a "contenidos y continente" se refiere.