Putin recuerda "cómo se engendró el fascismo" en el aniversario del fin de la II Guerra Mundial

• Pide el cumplimiento de la ley internacional y el respeto a la soberanía
• Putin y Medvedev presiden el tradicional desfile de la Victoria

Putin aprovecha la celebración del Día de la Victoria para pedir el respeto a la soberanía

En la plaza Roja de Moscú y escoltado por decenas de generales del Ejército, el presidente ruso, Vladímir Putin, ha asegurado que promoverá el poder de Rusia en la escena mundial con un discurso patriótico para festejar el 67º aniversario de la victoria soviética sobre la Alemania nazi en la Segunda Guerra Mundial.

Dos días de jurar su mandato como presidente del país durante los próximos seis años, Putin ha pedido que se recuerde "cómo se engendró el fascismo" y que se respete la soberanía de cada país para evitar una repetición de la Segunda Guerra Mundial.

El presidente ruso se enfrenta al reto de reforzar su liderazgo, ampliamente cuestionado tras las mayores protestas en su contra desde que llegó al poder en el año 2000.

Putin ha aprovechado los festejos para reiterar la posición de Rusia en contra de la injerencia en los asuntos de estados soberanos, en particular en Siria.

"Quiero destacar que el estricto cumplimiento de las normas internacionales, el respeto de la soberanía estatal y la elección autónoma de cada pueblo es una de las garantías incondicionales de que la tragedia de la pasada guerra no se repetirá", ha dicho Putin al inaugurar la tradicional parada militar en la plaza Roja de Moscú.

"No tenemos derecho de olvidar cómo se engendró (el nazismo), como cobraba fuerza e insolencia ante los ojos del mundo entero, cómo los bárbaros amenazaron con aniquilar pueblos enteros, erigirse en dueños de los destinos de estados y continentes", ha recalcado.

Retórica anti-americana

Las intenciones agresivas de la Alemania nazi, ha recordado, "no recibieron el debido rechazo colectivo". "La división de los países, sus sospechas recíprocas y la confrontación ideológica no permitieron evitar la II Guerra Mundial. La humanidad tuvo que pagar por ello un desmesurado precio", ha subrayado.

No obstante, ha añadido, "la responsabilidad y la decisión común de hacer frente al mal prevalecieron". "Hicieron frente al enemigo las fuerzas de la coalición antihitleriana y rendimos homenaje a los estados que hicieron un enorme aporte a la derrota del enemigo común", ha enfatizado.

Putin, de 59 años, ha usado con frecuencia duras declaraciones sobre la política exterior para congregar a la gente y recurrió a la retórica anti-americana en la campaña de las elecciones presidenciales del pasado 4 de marzo. Asimismo, esta táctica ha sido utilizada también por otros líderes soviéticos, que este miércoles han celebrado también fiestas nacionales de la Victoria, coincidiendo además con el Día de Europa.

Durante la campaña electoral, Putin acusó a la ecretaria de Estado norteamericana, Hillary Clinton, de agitar las protestas en contra de sus 12 años de gobierno mediante el fomento de "mercenarios" enemigos del Kremlin.

Aliado de Siria e Irán

Un general ruso también advirtió la semana pasada de que Moscú podría llevar a cabo ataques preventivos sobre las futuras instalaciones de defensa anti-misiles de la OTAN. La Alianza Atlántica, por su parte, calificó de "injustificadas" esas amenazas y dijo que el sistema no representa ninguna provocación para Rusia.

No obstante, Putin ha asegurado estar dispuesto a desarrollar las relaciones con EE.UU., enemigo tradicional de Moscú durante la Guerra Fría y su compañero de veto en el Consejo de Seguridad de la ONU, pero ha dejado claro que debe ser en condiciones de igualdad.

Rusia ya ha reafirmado en varios frentes, oponiéndose a las sanciones promovidas por las potencias occidentales contra aliados del Kremlin, como Siria e Irán. De hecho, Putin se ha convertido en el principal apoyo del presidente sirio, Bashar el Asad, en la guerra que mantiene con los rebeldes y que se ha cobrado ya más de 9.000 muertos según la ONU.