Una joven española recrea su 'asesinato profesional' para pedir una oportunidad

• Ana Hernández solicitó un trabajo con una original campaña
• Recreó un asesinato en una céntrica calle de Londres
• El lema: "Es un crimen no darme una oportunidad"
• La creadora asegura que "no esperaba tanto éxito"

La escena del crimen que creó Ana Hernández en una calle de Londres.

Ana es una más de los muchos jóvenes españoles que han tenido que salir del país para buscar una oportunidad de trabajo. Su caso no se diferenciaría del resto sino fuera porque ella promovió una campaña publicitaria para reivindicar una oportunidad laboral bajo el lema: "Es un crimen no darme una oportunidad". Una campaña creada por ella misma, totalmente gratuita y muy original.

Ana Hernández es salmantina, tiene 28 años y está licenciada en Publicidad y Relaciones Públicas en la Universidad Pontificia de Salamanca. Pocos meses después de acabar la carrera viajó a Inglaterra para perfeccionar su nivel de inglés.

Aterrizó en Bristol como 'oper' donde fue acogida por una familia. Allí consiguió sus primeras prácticas mientras las compaginaba con las clases de inglés y su trabajo de camarera.

Tras varios años en esta localidad pidió unas prácticas en la prestigiosa agencia de publicidad McCann. Finalmente se las dieron y se trasladó a vivir a Londres para llevarlas a cabo. Tras dos semanas de trabajo su contrato se acabó. Su plan comenzó entonces a tomar forma.

Un crimen en medio de la calle

Lejos de quedarse parada esperando a que alguien llamara a su puerta, esta salmantina empezó a darle vueltas a la forma de decirle a las empresas que hay muchos jóvenes preparados que merecen una oportunidad laboral. "Algo había que hacer, ya no vale eso de dejar el curriculum", explica Ana Hernández a RTVE. es.

“Ya no vale eso de dejar el curriculum“

Y así fue como a las 7:30 de la mañana de su último día de prácticas, Ana se acercó hasta la calle Herband Street de Londres donde tiene sus oficinas la agencia publicitaria McCann.

Una vez allí, pintó en el suelo la silueta de un hombre a modo de crimen, le puso un cerco como el que pone la policía cuando hay un asesinato y una contundente frase: "Es un crimen no darme una oportunidad" y debajo del texto la dirección de su página web, en estos días muy visitada. "Las personas que pasaban por allí se paraban y miraban con mucha curiosidad", cuenta Ana.

¿Y por qué la idea de un crimen? "Pensé que iba a llamar mucho la atención, lo que quería era que la gente se fijase y se parase, siempre jugando con el concepto de oportunidad", explica a RTVE.es. Como cuenta ella misma ni se imaginó que su campaña pudiera tener tanto éxito. "La gente flipaba y no paraba de sacar fotografías", cuenta esta publicista.

“Jamás pensé que fuera a tener tanto éxito“

El boca a boca y las redes sociales han ayudado mucho a su difusión. Y es que, además de en Londres se ha hablado de esta peculiar campaña publicitaria en España, Suecia e incluso en Miami, en gran parte gracias a los bloggers.

"Mis compañeros me felicitaban"

La original campaña de esta joven española solo duro una hora y media visible. Fue poco tiempo, pero el suficiente para que en la agencia McCann no se hablara de otra cosa durante todo el día. "Mis compañeros estaban muy contentos y me felicitaban", cuenta Ana.

Para satisfacción de esta publicista el propio presidente de la agencia McCann fue a hablar con ella para felicitarla por su campaña e incluso colgaron las fotografías en el blog de la agencia y en su cuenta oficial de Twitter. "Me dijo que había sido una de las mejores campañas publicitarias y que los creativos contaban conmigo para próximos proyectos", explica.

“Me dijo que había sido una de las mejores campañas“

Pero parece que al final su idea no dio los frutos esperados y tras hablar con Ana, la agencia McCann la informó de que los directores creativos iban a cambiar y que en estos momentos no había sitio en la agencia. "Me dijeron que me tenían en mente pero sinceramente es muy díficil", apunta.

Pese al inesperado éxito de su campaña publicitaria en plena calle, Ana Hernández sigue esperando en Londres una oportunidad laboral. El crimen está aún por resolver.