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El defensor del pueblo de Galicia presenta su renuncia en el Parlamento

  • El Valedor do Pobo, Benigno López, no explica los motivos
  • Había gran presión política de la oposición por sus posicionamientos
  • Justificaba los recortes y dudaba de la viabilidad de la ley de dependencia

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EL VALEDOR DO POBO PRESENTA SU RENUNCIA EN EL REGISTRO DEL PARLAMENTO
Fotografía de archivo tomada en Santiago de Compostela el 3 de mayo de 2012 del Valedor do Pobo de Galicia, Benigno López, durante una comparecencia parlamentaria.

El Valedor do Pobo, Benigno López, ha presentado este martes la renuncia de su cargo, mediante un breve escrito presentado a las 18 horas en el Registro del Parlamento de Galicia, en el que no explica los motivos de su renuncia.

Durante los últimos días, la presión política de los grupos de la oposición sobre la figura del Valedor aumentó debido a unas declaraciones en las que justificaba los recortes del Gobierno y ponía en duda la viabilidad de la ley de dependencia.

Estas declaraciones ya provocaron entonces, hace dos semanas, la dimisión de una de las vicevaledoras, Dolores Galovart, la designada a propuesta del PSdeG, por su rechazo a estas valoraciones hechas por el Valedor.

Pese a la presión de socialistas y nacionalistas en el Parlamento gallego, este mismo martes, tras la celebración de la Junta de Portavoces, el portavoz del grupo mayoritario, Pedro Puy (PP), ha defendido la continuidad del Valedor, ya que su mandato finaliza dentro de dos meses.

Protagonista de polémicas

López (A Coruña, 1952) tomó posesión el 27 de julio de 2007, durante la pasada legislatura, tras ser designado por unanimidad para el cargo por el Parlamento el 17 de ese mismo mes, por lo que en apenas dos meses finalizaba su mandato.

Antes de ocupar el cargo de alto comisionado de la Cámara autonómica, Benigno López ejercía como magistrado del Tribunal Superior de Justicia de Galicia.

Desde su toma de posesión, el 27 de julio de 2007, Benigno López González protagonizó diferentes polémicas, destacando especialmente los severos reproches que suscitaron desde las filas del BNG sus comentarios sobre el gallego.

El alto comisionado, poco más de un mes después de la toma de posesión, suscitó las tempranas críticas del entonces presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, y de su vicepresidente, Anxo Quintana, al asegurar que la introducción del gallego en el ámbito jurídico podía generar "inseguridad" a los no duchos en este idioma.

Más adelante, a finales de 2011, aceptó a trámite una reclamación de un dirigente vigués de UPyD sobre un libro de texto, que provocó la modificación por parte de la Consellería de Educación donde recogía que el gallego "es la lengua propia de Galicia", pero no añadía la condición de cooficialidad del castellano.

Poco antes, en 2010, había afeado a la Xunta y el Ayuntamiento de A Coruña la edición de una guía de consumo con una única versión en gallego.

La última polémica la suscitó cuando aseguró que la Ley de Dependencia "nació muerta" por falta de presupuesto. Esta aseveración motivó la dimisión de la vicevaledora Dolores Galovart y críticas desde varios partidos y sindicatos.

El Comité de Entidades de Representantes de Personas con Discapacidad de Galicia (Cermi Galicia) llegó a pedirle que rectificase sus palabras sobre la necesidad de suspender la aplicación de la Ley de Dependencia o dimitiese de su cargo.