La música, el idioma para crear, no para imitar
- Musikanaiz utiliza la música para promover el desarrollo de las personas
- Yamel Romero decidió crearla hace un año en San Sebastián
La música por la música, “como medio, no como fin”. Desde el primer año de vida hasta el final, hay una “historia sonora” para convertir las experiencias en vivencias.
Yamel Romero se dedica a hacer una “sencilla” propuesta a los niños desde el primer año, hasta los mayores, para promover su desarrollo como personas.
Después de haber dedicado diez años a trabajar en un centro de enseñanza musical en Madrid, decidió trasladarse a San Sebastián. Allí, en el paro, empezó a estudiar euskera para continuar haciendo lo mismo, pero se dio cuenta de que no avanzaba, de que “lo suyo es la música” y así es como creó Musikanaiz.
Así fue como este cubano, de 38 años, destinó todo el dinero de la prestación por desempleo a crear esta nueva escuela de música, gracias también al apoyo económico de su familia.
Cosas simples
Ahora considera su trabajo como su mayor afición y cree además que este mismo proyecto en Madrid hubiera sido “mucho más difícil”, porque San Sebastián es “pequeño y funciona el boca a boca” para darse a conocer.
Musikanaiz lleva en marcha un año, tiene 35 alumnos y organiza otros talleres en colegios a través del Ayuntamiento de San Sebastián. Yamel recoge “lo que traen los niños y las personas mayores para irles acompañando hasta un objetivo”, a través de la música.
La educación actual “corta la creatividad” y por eso, cree que “mucha gente estudia algo y después se encuentra con que su trabajo no le gusta”, porque en realidad, “el 80% de lo que haces son las ganas y el 20% los títulos”. La enseñanza se fundamenta demasiado a menudo en imitar una pieza musical hasta que su ejecución sea perfecta, pero no en la creatividad.
Cosas simples, como pararse a contar las teclas del piano y descubrir el tono de cada una, expresarse haciendo un dibujo. Se utilizan después para conocer a cada uno de los alumnos de la escuela.
Ayudar a que la gente se ayude
El coaching es la técnica que Yamel utiliza para "ayudar a la gente a que se ayude a si misma". Consiste en hacer preguntas abiertas, como por ejemplo, para qué quieres eso o qué significado tiene el color y la forma en el dibujo que has hecho.
Otra de las propuestas de Musikanaiz es la musicoterapia, empleada en niños con problemas de habla, de psicomotricidad, o audición, "como un niño que casi por completo es sordo" y se comunica con las vibraciones de los instrumentos.
Lo importante "es estar atento, saber lo que quieres y que lo que estés haciendo esté sincronizado con tu propósito de la vida". Este emprendedor lo cuenta con un ejemplo: es como cuando quieres un coche en particular y de repente ves ese coche en todas partes.
El primer año de vida de su empresa ha sido "fenomenal", de momento ha conseguido preparar dos proyectos para el curso que viene, uno dirigido a profesores de enseñanza primaria y secundaria y otro para docentes del conservatorio de música sobre "herramientas" para acercarse a los más pequeños.
Yamel llegó a Galicia hace 14 años "tocando en orquestas", hizo la carrera de composición en Madrid y por motivos familiares acabó marchándose a San Sebastián. Ahora una de las mejores experiencias es ver cómo los niños enseñan a sus propios padres a tocar un instrumento, algo, asegura Yamel, que "es imposible de explicar".