La dirección de Gamesa en Medina del Campo y el comité de empresa negocian un ERE
- El expediente, de extinción, afectaría a 74 de sus 108 trabajadores
- Justifica la decisión por la "incertidumbre y volatilidad" del sector eólico
- El comité de empresa asegura que "tienen carga de trabajo"
La dirección de la compañía Made-Gamesa, fabricante de turbinas de energía eólica, negocia desde este martes en su factoría de Medina del Campo (Valladolid), un expediente de regulación de empleo (ERE) de extinción para 74 de sus 108 trabajadores, 67 del área de montaje y 7 de servicios.
La compañía justifica el ERE por la "incertidumbre y volatilidad" que atraviesa el sector industrial eólico en España, lo que "obliga" a presentar este tipo de medidas para poder dar continuidad a la empresa y "adaptar la producción a la demanda".
El plan, que la dirección presentó al comité de empresa el 17 de mayo y a la Consejería de Empleo de la Junta de Castilla y León al día siguiente, propone, según fuentes de la propia compañía, que el 50% de los trabajadores afectados pueda seguir trabajando de manera inmediata al cese en cualquiera de las plantas que la compañía tiene en el resto de la geografía española. La indemnización ofrecida por la compañía es de 24 días por año trabajado con un máximo de 12 mensualidades.
Desde el comité de empresa, su secretario, Juan Carlos Álvarez, califica el plan de acompañamiento social del expediente como "irrisorio" porque ofrecen 28 plazas a cubrir en el grupo, pero solo pueden "optar por ocho de ellas porque las demás están consolidadas", al tratarse de puestos de responsabilidad y además la empresa "no asegura el puesto de trabajo en destino".
Añade que la dirección de la planta les comunicó que las causas del ERE son "técnicas y organizativas" porque han registrado pérdidas en el primer trimestre del año. Juan Carlos Álvarez considera que Gamesa compró la planta "porque era de la competencia", dijo que "apostaban" por ellos y ahora les "han dado la patada".
Proceso de dos años
El objetivo de este expediente de extinción, señalan desde la compañía, es hacerla más "competitiva" y centralizar la producción de piezas de tamaño mediano en la fábrica de Ágreda (Soria), mientras que las más grande se siguen fabricando en Zaragoza.
El secretario del comité de empresa, Juan Carlos Álvarez, asegura que la planta "tiene carga de trabajo" y que lo que la dirección plantea es "una deslocalización". Señalan que no entienden porque "se llevan la produccción a una planta más pequeña no dan abasto con el trabajo y en la que trabajan con empresas subcontratadas".
Por su parte, la empresa señala que durante dos años han tratado "darle viabilidad" a la planta de Medina del Campo por "distintas soluciones". La fábrica ya aplicó un ERE de extinción en 2011 que significó el cese de 30 trabajadores de la plantilla para daptarse a la producción, explica Juan Carlos Álvarez.
Desaparición del tejido industrial
Este no es el primer ERE de extinción que Gamesa presenta en España, porque en 2010 ya hubo cinco ERE, uno de extinción y cuatro de regulación temporal, que ya terminaron de aplicarse.
El plazo para la negociación del expediente entre la dirección de Made-Gamesa y los representantes sindicales es de un mes desde que se presentó a la administración. Transcurrido ese plazo, la Consejería de Empleo tramitará el acuerdo, en caso de que lo haya, entre la dirección de Made-Gamesa y los representantes sindicales.
La fábrica de Medina del Campo era propiedad de Endesa, hasta que Gamesa la adquirió en 2003. En la actualidad, señala Juan Carlos Álvarez, el desempleo en la la localidad vallisoletana asciende a 3.020 personas, en una población con menos de 10.000 habitantes, que en los últimos tres años "se ha quedado desierta" porque el tejido industrial "ha desaparecido".