Annan pide a Asad "pasos efectivos" al llegar a Damasco tras la masacre de Al Houla

• El mediador de la ONU ha regresado a Damasco
• El martes se encontrará con Bachar al Asad
• Rusia cree que ambos bandos tienen responsabilidad en la matanza de Houla
• La comisionada de Derechos Humanos advierte que pueden ser crímenes contra la humanidad

Kofi Annan enviado especial de Naciones Unidas en Siria

El mediador de la ONU y de la Liga Árabe, para Siria,  Kofi Annan, ha adelantado su viaje a Damasco y ha viajado a la capital siria para encontrarse con Bachar al Asad. A su llegada, Annan se ha declarado "horrorizado" por la matanza de la ciudad de Al Houla, perpetrada el viernes en el centro del país y ha instado al régimen a "adoptar pasos efectivos para demostrar que es serio en su intención de resolver la crisis pacíficamente".

El mediador de la ONU se reunirá con el ministro de Exteriores,  Walid Mouallem, antes de ser recibido por Asad el martes. Su intención, ha dicho Annan, es mantener una discusión "seria y franca" con Asad.

Esta es la décima visita de Kofi Annan al país desde el comienzo de su misión, hace ya tres meses, y se produce tras la condena del Consejo de Seguridad de la ONU, incluyendo a Rusia, por los hechos de Al Houla, que han provocado la indignación internacional.

Mientras, la ONG Human Rights Watch ha hecho públicos algunos de los testimonios que ha recabado en la masacre de Al Haula. Según algunos supervivientes de la matanza que han hablado con la ONG, el ejército sirio bombardeó la zona el pasado 25 de mayo y después hombres armados, con uniformes militares, irrumpieron en varias viviendas y ejecutaron a familias enteras.

Una de las supervivientes, una anciana de la familia Abdel Razak, explicó a HRW que aquel día estaba en su domicilio con sus tres nietos, tres hijas, su nuera, su cuñada y un primo: "Estaba sola en una habitación cuando escuché a un hombre, que estaba gritando a mi familia. Yo me escondí detrás de la puerta y vi a otro hombre de pie junto a la entrada y otro dentro de la casa. Llevaban ropa militar. No pude ver sus caras", recordó, según Efe.

Tres minutos después, la mujer escuchó los gritos de sus parientes y los lloros de los niños, de entre diez y catorce años. "Me tiré al suelo e intenté arrastrarme para ver lo que pasaba -siguió-. Cuando me acerqué a la puerta, escuché varios disparos. Estaba horrorizada. Oí que los soldados se marchaban. Miré dentro de la habitación y vi a todos los miembros de mi familia (muertos) con disparos. Tenían tiros en sus cuerpos y la cabeza".

En un comunicado, HRW destaca que todos los testigos afirmaron que los hombres armados eran partidarios del Gobierno, pero subraya que no sabían si eran miembros del Ejército o de milicias progubernamentales, denominadas "shabiha".

Damasco acusa a "militantes islamistas"

Este lunes, las autoridades sirias han vuelto a rechazar la autoría de la masacre, tal y como ya hicieran este domingo, y ha acusado a militantes islamistas de ser los responsables de las muertes.

En una carta dirigida al Consejo de Seguridad de la ONU y publicada por los medios de comunicación estatales, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Siria ha manifestado que el ejército sirio actúa en “legítima defensa contra los grupos terroristas”, según informa Reuter.

El ministerio ha añadido además que los responsables utilizaron cuchillos, lo que considera que es una “firma” de los ataques de militantes islamistas. Mientras, el portavoz del ministro de Exteriores sirio, Jihad Makdissi, ha condenado lo que ha llamado un “tsunami de mentiras” contra el Gobierno sirio, según informa la agencia oficial Sana.

Rusia acusa a ambos bandos de la matanza

Por su parte, el ministro de Exteriores ruso, Sergei Lavrov, considera que ambos bandos, gobierno y oposición armada, tienen responsabilidad en la matanza, en la que murieron 116 personas, incluyendo niños. "Nos enfrentamos a una situación en que evidentemente ambas partes tienen una mano en la muerte de gente inocente", ha declarado Lavrov en una conferencia de prensa conjunta en Moscú con el ministro de Exteriores británico, William Hague.

Lavrov ha vuelto a descalificar a quienes exigen la salida del poder de Bachar al Asad como condición para cualquier solución del conflicto, y ha reiterado que se debe presionar a ambas partes para que cesen la violencia. Este objetivo es "más importante que quién tiene el poder en Siria", según Lavrov.

Durante la rueda de prensa, Hague ha responsabilizado exclusivamente al régimen sirio.  "Lo que ha sucedido es una violación de los compromisos asumidos por el Gobierno de Siria. Y como bien ha dicho (el ministro de Exteriores ruso) Serguéi Lavrov, todas las partes deben frenar acciones de este tipo", ha declarado el ministro británico.

También este lunes, el Ministerio de Exteriores chino ha condenado los "crueles asesinatos"  de Houla, aunque no ha responsabilizado al gobierno de Asad. "China está consternada. Sobre todo, por el daño infligido a las  mujeres y niños", ha expresado en rueda de prensa el portavoz del Ministerio, Liu Weimin.

Liu se ha sumado sí a la condena internacional y ha pedido una investigación. El portavoz chino ha destacado que es "necesario" un alto el fuego inmediato y ha instado al gobierno de Damasco a que siga las sugerencias de Annan.

Crímen contra la humanidad

Por su parte, la oposición siria ha pedido a los países que les apoyan “medios eficaces” para defenderse del régimen. "Hacemos un llamamiento a todos los amigos y hermanos del pueblo sirio que provean de inmediato y antes de que sea demasiado tarde de los medios efectivos de defensa propia", ha dicho el Consejo Nacional Sirio, según informa Afp.

"Es hora de que haya una intervención urgente para detener las matanzas diarias del pueblo sirio por el régimen opresor", el Consejo de Seguridad Nacional en su texto. "Las cosas se han vuelto tan peligrosas que ya no es posible permanecer en silencio", ha insistido el SNC. "El simple hecho de llamar a (al final de la violencia) es ser un cómplice de los asesinos".

Mientras, la alta comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Navi Pillay, ha afirmado que el régimen sirio no puede utilizar bajo ninguna circunstancia la excusa de la "defensa contra el terrorismo" para intentar justificar crímenes como los ocurridos en Houla. Pillay ha adelantado que este hecho puede constituir un crimen contra la humanidad.

La máxima responsable de derechos humanos de la ONU ha señalado que "ni el Presidente sirio ni su Gobierno pueden invocar bajo ninguna circunstancia la defensa contra el terrorismo para intentar justificar la violencia indiscriminada y asesinatos del tipo que sus fuerzas y aliados han cometido en Houla".

En una declaración en la que ha dicho sentirse "horrorizada" por el "gran número de personas asesinadas y heridas por las fuerzas gubernamentales y milicias en tres poblados de Houla", Pillay ha aludido directamente a informaciones que indican que miembros de la milicia progubernamental Shabiha entraron a los poblados atacados y fueron los responsables de los asesinatos.

El Gobierno de Al Asad ha negado, por su parte, que sus fuerzas estuviesen implicadas en la masacre. Sin embargo, Pillay ha explicado que las denuncias que implican a fuerzas progubernamentales "son consistentes con otros incidentes documentados por mi oficina, por la Comisión Investigadora de la ONU para Siria y otras organizaciones de derechos humanos".

Pillay ha pedido una investigación imparcial y ha recordado que el Gobierno sirio tiene la obligación "legal y moral" de colaborar con una eventual indagación de este tipo, así como de tomar medidas para evitar que un crimen como este vuelva a ocurrir.

Prosigue la violencia

Entretanto, la violencia prosigue en distintas provincias del país, según informaciones de los grupos opositores. El Observatorio Sirio de Derechos Humanos ha afirmado que este lunes ha habido varias explosiones simultáneas en la localidad de Homs, en el centro del país, donde en el barrio de Jalidiya, uno de los más castigados, han caído varios proyectiles y se han oído disparos.

En la periferia de Damasco se han resgistrado disparos en el pueblo de Yabrud que han coincidido con la irrupción de las tropas del régimen. La Comisión General de la Revolución Siria informa de explosiones en las ciudades norteñas de Idleb y Alepo, mientras que los Comités de Coordinación Local hablan de disparos en Deraa, en el sur.

El Observatorio y la Comisión aseguran que en la jornada del domingo hubo entre 33 y 53 muertos en la localidad central de Hama por los bombardeos de las fuerzas gubernamentales, aunque esas cifras no han sido confirmadas por el resto de grupos opositores.

Ninguna de estas informaciones ha podido ser contrastada por fuentes independientes debido a las limitaciones que el gobierno de Siria impone a la prensa internacional.