Bruselas pide a la eurozona que el fondo de rescate ayude directamente a los bancos
- Mariano Rajoy defendió esta propuesta el pasado lunes en rueda de prensa
- Francia y el FMI también están a favor; Merkel siempre lo ha rechazado
- Ayudaría a recapitalizar la banca española sin el estigma de rescatar al país
- No podría aplicarse de forma inmediata: cambiar los tratados tardaría meses
- La Comisión recomienda que se "de prioridad" al gasto público productivo
La Comisión Europea (CE) recomienda a los países de la moneda única que se muevan a una unión bancaria, consideren los eurobonos y permitan la recapitalización directa de sus bancos a través del fondo de rescate europeo. En plena crisis de Bankia, Bruselas muestra así su preocupación por la salud del sector finaciero de la eurozona.
Esta propuesta es defendida por el FMI, el presidente francés, François Hollande, y también Mariano Rajoy. Así lo manifestó el presidente del Gobiernoen la rueda de prensa ofrecida el pasado lunes en la sede del PP (ver vídeo), donde señaló que es partidario de que el fondo de rescate europeo pueda recapitalizar directamente a los bancos. No obstante, Rajoy siempre ha negado que la entidades financieras españolas vayan a necesitar un rescate y ha solicitado la intervención del BCE.
"Una integración más estrecha en estructuras y prácticas de supervisión entre los países de la zona euro, en la gestión de crisis transfronterizas y distribución de sus cargas, hacia una 'unión bancaria', podría ser un complemento importante para la actual estructura" de la Unión Económica y Monetaria de Europa", reza el documento de la CE en el que evalúa las reformas nacionales y programas de estabilidad de los países de la zona del euro para 2012.
"En el mismo sentido, para romper el vínculo entre los bancos y los Estados, la recapitalización directa a través del Mecanismo Europeo de Estabilidad podría barajarse", señala la CE, algo a lo que siempre se ha opuesto frontalmente la canciller alemana, Angela Merkel.
Reforma de los tratados del fondo de rescate
El presidente de la CE, José Manuel Durao Barroso, ha afirmado que, aunque la inyección de dinero directamente a los bancos requeriría una reforma del tratado, la eurozona debe avanzar y tener en cuenta que "es importante emplear todo tipo de flexibilidad" y no solo en cuanto a los instrumentos de los que dispone la eurozona sino también para la "rapidez de la reacción de los cortafuegos".
El fondo de rescate permanente, que entrará en vigor el próximo 1 de julio, está concebido para que no pueda prestar directamente a los bancos, sino que debe hacerlo a través de los Gobiernos nacionales, lo que contribuye a engrosar la deuda soberana y a estigmatizar al país como "rescatado". Para evitar esto, sería necesario reformar el tratado, algo que no cuenta con el beneplácito de Berlín y que requiere un tiempo que España, acosada por los mercados, no tiene.
El ministro de Economía, Luis de Guindos, viaja este mismo miércoles a Berlín para reunirse con el ministro de Finanzas alemán, Wolfgang Schäuble, un encuentro que podría servir para limar diferencias y que se enmarca en una escalada histórica de la prima de riesgo española.
Más gasto público productivo
Sobre la eterna discusión entre austeridad y crecimiento, la CE deja claro que la consolidación fiscal debe proseguir, pero insta a los líderes europeos a dar prioridad" al gasto público productivo para potenciar el crecimiento.
"Mientras prosigue la necesidad de respetar la consolidación fiscal, el gasto público productivo necesita ser priorizado", señala en su escrito de revisión la CE, donde propone impulsar la creación de empleo con nuevas políticas para el sector y una bajada de la fiscalidad laboral.
Para cumplir con los esfuerzos de ajuste presupuestario, la CE señala que "hay varias maneras de incrementar la recaudación pública sin subir los impuestos", aunque cree inevitable "aumentar algunos gravámenes o introducir nuevas tasas" como última opción. En su informe, indica que para no perjudicar el crecimiento económico, lo más adecuado sería aumentar los impuestos al consumo, la propiedad y el medioambiente, en lugar de subir la fiscalidad laboral y del capital, al contrario de lo que ha hecho España.
En cuanto a Italia, otro de los países bajo escrutinio de los mercados, Bruselas alaba la "amplia y decidida" estrategia de consolidación fiscal que el Gobierno de Mario Monti ha puesto en marcha, y le anima a implementar su "ambiciosa" agenda de reformas ya aprobada.
Críticas a Francia y ultimátum a Grecia
En el análisis de los desequilibrios macroeconómicos excesivos, la Comisión ha sido especialmente crítica con Francia, a la que pide esfuerzos adicionales de consolidación fiscal para cumplir con el objetivo de reducción del déficit al 3% en 2013 e insta a adoptar reformas para paliar la pérdida de competividad de la economía gala.
"El alto nivel de la deuda pública representa una amenaza para la sostenibilidad de las finanzas públicas, y el reciente aumento de la prima de riesgo sugiere que los mercados están preocupados por la situación fiscal del país", ha subrayado la Comisión.
En cuanto a Grecia, Bruselas vincula el futuro del país a las decisivas elecciones legislativas del próximo 17 de junio. La CE ha advertido a Atenas de que debe cumplir el paquete de austeridad si quiere seguir recibiendo la ayuda financiera del segundo rescate, y ha condicionado la fecha de la próxima visita de la misión de la troika al resultado de los comicios.