Del juego sin mandos al juego con la tableta

• Microsoft anuncia la tecnología "SmartGlass"
• Es la interacción entre la tableta, el teléfono inteligente y la Xbox 360
• Las grandes sagas, protagonistas de la conferencia previa al E3

Microsoft ha presentado su tableta "SmartGlass" con la que conecta consola, móvil y tele.

Una años más, el pabellón Galen Center de Los Ángeles ha acogido la conferencia de Microsoft la víspera del comienzo de la feria E3. Hora y media de juegos y espectáculo donde no ha faltado la actuación en directo del cantante Usher, la presencia en el escenario de los creadores de South Park (anunciando un nuevo juego de la famosa serie de animación) y el legendario jugador de fútbol americano Joe Montana dándole órdenes con su voz a los jugadores virtuales del videojuego Madden NFL.

La conferencia ha comenzado con imágenes del videojuego más importante de Xbox 360 para este año, "Halo 4". Tampoco han querido perderse esta cita, el nuevo "Gears of War: Judgement", que no saldrá hasta 2013, y "Forza: Horizon". El popular juego de conducción cambia de rumbo para proponerle al jugador amplios circuitos abiertos en diferentes lugares del mundo.

Otros juegos que se han visto por primera vez en público han sido "Splinter Cell: Blacklist", "Resident Evil 6" o "Call of Duty: Black Ops 2". Todos ellos continuaciones de grandes franquicias. Como curiosidad, el partido de fútbol jugado mostrando "FIFA 13" ha sido un FC Barcelona-Real Madrid, y se ha anunciado un videojuego, "Matter", del director de "Piratas del Caribe", Gore Verbinski.

Los más interesante de esta conferencia no han sido los juegos. Microsoft ha presentado la tecnología "SmartGlass", que conecta la tableta y el smartphone con la Xbox 360, ofreciendo nuevas experiencias de juego y multimedia. Por ejemplo, reproducimos una película en la tableta y la seguimos viendo en la televisión a través de la consola -y en ese momento, la tableta nos ofrece información adicional de la película. Otro ejemplo mostrado ha sido con la serie "Juego de Tronos". Mientras vemos el episodio en la tele, la tableta nos muestra un mapa que nos indica donde se encuentran los personajes que aparecen en pantalla y su árbol genealógico.

Aplicaciones infinitas

Las aplicaciones son infinitas. Se puede convertir la tableta en un mando de videojuego o controlar la tele con el móvil. Da igual que el entorno sea Windows Phone, Android o iOS, la aplicación "SmartGlass" permite la conexión entre sistema diferentes. Será una realidad en otoño de este año. La demostración ha sido realizada en directo con una tableta con el próximo Windows 8 y un móvil Lumia (producto de la alianza entre Nokia y Windows Phone). Todo queda en casa.

Aunque muchos de los juegos presentados hoy apuestan por el controlador sin mandos Kinect (ya sea por la detección de movimientos o el control de voz), el que más partido le ha sacado a este dispositivo en la conferencia ha sido "Kinect Training". Es fruto de la colaboración de Microsoft con Nike. Han desarrollado un videojuego para mantenernos en forma que aprovecha al máximo la potencia de la cámara y los sensores de movimiento de Kinect. No le faltan todo tipo de planes de entrenamiento, estadísticas y podemos compartir ejercicios con otros jugadores y comparar resultados. Además, es compatible con teléfonos inteligentes Windows Phone.

También se ha anunciado como una evolución de Kinect el reconocimiento de voz en varios idiomas, entre ellos el español.

Pocas sorpresas en cuanto a juegos, pero sí muchas pistas de hacia dónde va el futuro de las consolas. Atrás quedan las demostraciones de lo que se puede hacer sin mandos a la hora de jugar. Se han dado los primeros pasos para conectar consolas con teléfonos inteligentes y tabletas, dispositivos que le están comiendo terreno al videojuego tradicional. La interacción de los tres deja muy claro que aún quedan fronteras que explorar en el mundo del ocio electrónico.

La conferencia de Microsoft ha terminado con otro de los videojuegos más esperados del año, "Call of Duty: Black Ops 2". Mucho tiro, muchas explosiones e imágenes espectaculares para un videojuego que ahora apuesta por las armas futuristas, pero que huele a más de lo mismo. Aún así, cuando se ponga a la venta en noviembre volverá a ser número uno.