El mayordomo del Papa: ¿agente doble?
- El interrogatorio al mayordomo ha aportado datos y nombres
- Los últimos documentos señalan al secretario del Papa y al número dos del Vaticano
Empieza este martes el interrogatorio ante el juez del mayordomo del Papa aunque parece que Paolo Gabriele ya ha aportado datos y nombres desde la celda en la que permanece recluido desde el 22 de mayo. La prensa indica que podrían ser cinco los cómplices del mayordomo. Pero la historia es más retorcida porque el ayuda de cámara del Papa podría ser un agente doble.
Y no quiere decir que estuviera al servicio de Dios y de los hombres, no. Este doble empleo explicaría como, fueron callados inmediatamente algunos dedos acusadores que se fijaron en él como culpable de la fuga de noticias.
Ocurrió hace seis meses y desde las altas instancias vaticanas se negó drásticamente la culpabilidad del mayordomo. Curiosamente, tal y como se ha comprobado ahora, una vez fue señalado, el mayordomo empezó a moverse con más facilidad incluso dejando algún documento escrito sobre uno de sus encuentros.
También ese papel de informador a dos bandas avalaría el incomprensible hallazgo de cajas de documentos personales en su propia vivienda.
Más documentos
Mientras tanto, los documentos siguen apareciendo en prensa y alguna de esas gargantas profundas, señalan al mayordomo como una pieza casi sin importancia en el puzzle del espionaje vaticano. En los últimos documentos publicados se trata de atacar al secretario del papa, padre Georg Gänswein y al número dos Vaticano, cardenal Bertone.
Precisamente , en una intervención en televisión, Bertone, ha denunciado los ataques "feroces, mordientes y organizados" contra Benedicto XVI que, advierte, en ningún caso asustan al Papa.
"Los ataques instrumentalizados han existido siempre, en todas las épocas – continúa Berttone- sin embargo esta vez parece que esos ataques sean más precisos, algunas veces también feroces, mordientes y organizados", declaró en una entrevista al canal de televisión público Rai 1.
Lo que es más triste en este caso y en estos acontecimientos es la violación de la vida privada del santo padre y de sus colaboradores más cercanos, concluye Bertone en las primeras manifestaciones públicas tras destaparse el denominado caso “Vatileaks”.