El conflicto del carbón se recrudece en la 16ª jornada de huelga indefinida
- En Asturias hay nueve detenidos y dos agentes heridos, según la Guardia Civil
- Además, varias sedes del PP han amanecido atacadas
- En León, varios miles de personas se han manifestado en defensa del carbón
Las protestas de los mineros en el decimosexto día de huelga indefinida del carbón han mostrado imágenes de enfrentamientos más contundentes con las fuerzas de seguridad, que se han saldado con nueve detenidos y dos agentes heridos en Asturias, según la Guardia Civil. Además, varias sedes del PP amanecieron con daños atribuidos a estas mismas protestas.
Por la tarde, el Instituto Armado ha informado de que había detenido en Vega de Anzo, en el municipio asturiano de Grado, a nueve manifestantes por lanzar piedras, voladores, tornillería y rodamientos con tiragomas a los agentes, dos de los cuales han resultado heridos, sin precisar su estado. Tras prestar declaración en el cuartel han sido puestos en libertad.
El conflicto sigue enquistado por la falta de acuerdo entre el Gobierno y los mineros, que llevan 16 días de protestas por los recortes del 63% en las ayudas del sector. Los trabajadores del carbón han convocado una huelga general el 18 de junio en las comarcas mineras de Castilla y León, Asturias y Aragón.
Durante la jornada se han repetido los cortes de carreteras y vías ferroviarias especialmente entre Asturias y León. Además de esas acciones, en los pozos Candín y Aller permanecen encerrados cuatro y tres mineros, respectivamente.
Las negociaciones en estos momentos están estancadas. A la última reunión, que se celebró el miércoles 6 de junio, los sindicatos se negaron a entrar, ya que se limitó la asistencia de los miembros de cada federación. Como protesta, los mineros se encadenaron a las puertas del Ministerio de Industria, que celebró la reunión únicamente con los empresarios.
Ataques a sedes del PP
Por otra parte, la sede central del Partido Popular de Asturias, en Oviedo, y la de Mieres han amanecido con pintura negra en las ventanas, mientras que en las sedes locales de Siero y Aller se produjo rotura de cristales.
Juan Antonio del Peño, portavoz del PP de Aller, en cuya sede se ha encontrado un saco de carbón de los autores del ataque, ha asegurado que su partido va a apostar por el mantenimiento de las ayudas a la minería. Por su parte, el secretario general del PP de Mieres, Luis Miguel Fernández Berandón, ha señalado que "nuevamente la sede del partido es blanco de las iras de aquellos que con este tipo de actos restan valor a sus reclamaciones".
Berandón ha insistido en que los autores de estos ataques "no representan a nadie y menos a la mayoría de la gente que vive en este concejo". También ha confiado en recibir "la condena a estos actos de las centrales sindicales mineras". "Es algo que no hicieron en el último ataque en el que fuimos insultados, amenazados y nuestra cristalera tiroteada a huevos y patadas", ha lamentado.
Miles de personas se manifiestan en León en defensa del carbón
Varios miles de personas han recorrido las calles de León para defender la minería del carbón y pedir unidad de acción frente a los recortes de más de un 60 por ciento al sector, en una marcha que ha concluido frente a la Diputación, donde se ha vitoreado a los mineros encerrados allí desde el 4 de junio.
La manifestación ha arrancado pasadas las 22:00 horas de la explanada de la Junta y ha seguido por las avenidas de la Condesa Sagasta y de Ordoño II hasta la plaza de Botines, donde la multitud ha jaleado a los mineros encerrados, tanto a los seis de la Diputación como a los siete que se encuentran en un pozo de Santa Cruz del Sil (León) desde el 21 de mayo, después de que uno de ellos abandonara la protesta por una afección respiratoria.
Muchos de los participantes lucían cascos con lámparas y buzos de trabajo, han gritado consignas como "Si esto no se arregla, guerra, guerra, guerra" y "Aquí están, estos son, los que sacan el carbón" y se han explosionado petardos a lo largo de todo el recorrido.
A la llegada a la plaza de Botines, pasadas las 23:00 horas, los manifestantes han roto en un sonoro aplauso y se han arrodillado frente a la ventana desde la que les observaban sus compañeros encerrados, con quienes han entonado emocionados el himno minero "Santa Bárbara Bendita".
Acto seguido, Iker, un niño de 11 años de la comarca minera de Laciana, ha leído un manifiesto en el que ha pedido solidaridad "más que nunca" y ha lamentado que quienes deberían defenderles, en alusión al Gobierno, estén abocando al cierre al sector, que se encuentra en huelga indefinida desde el pasado 30 de mayo.
Ha destacado que lo que se pide es "razonable" y "justo" y ha confiado en que el conflicto minero no tenga que "abrir telediarios" y que no haya más enfrentamientos con la policía ni antidisturbios en los pueblos, situación de la que se ha responsabilizado únicamente al Gobierno.