Enlaces accesibilidad

Masiva redada en Alemania contra el islamismo salafista

  • Registros en siete de los 16 estados federados
  • El ministro de Interior anuncia la ilegalización de uno de estos grupos
  • Los agentes buscan supuestas pruebas de su relación con el terrorismo islamista

Por
Cohes de Policía frente a un edificio en Frankfurt, Alemania
Cohes de Policía frente a un edificio en Frankfurt, Alemania

La Policía alemana ha realizado en la madrugada del jueves una redada simultánea en dependencias y viviendas de personas supuestamente relacionadas con el islamismo salafista en siete de los 16 estados federados del país.

Las redadas, en las que han participado unos 1.000 agentes, se han producido en los estados de Hamburgo, Schleswig-Holstein, Baja Sajonia, Berlín, Hesse, Renania del Norte-Westfalia y Baviera, según recoge la televisión pública ZDF. En total se han registrado 70 dependencias en busca de propaganda radical y de pruebas de posibles conexiones con el terrorismo islámico.

Entre otros objetivos, se registraron mezquitas de Solingen (oeste) y locales sociales.

El ministro de Interior, Hans-Peter Friedrich, ha anunciado además la ilegalización de uno de estos grupos salafistas, llamado Millatu Ibrahim por "trabajar contra nuestro orden constitucional".

Vigilancia permanente

Los musulmanes que las fuerzas de seguridad alemanas consideran relacionados con esta tendencia islamista radical están bajo vigilancia permanente de los servicios de observación del Ministerio alemán de Interior.

En toda Alemania hay localizados entre 2.500 y 4.000 militantes salafistas -del total de 3,5 millones de musulmanes del país- y, de acuerdo con datos del Ministerio de Interior citados por Efe, casi todas las células radicales islamistas hasta ahora desarticuladas en el país estaban vinculadas a esa minoría ideológica.

Recientemente, los salafistas repartieron miles de ejemplares del Corán, gratis y en alemán, en ciudades de todo el país, en lo que los servicios de seguridad vieron una intencionalidad proselitista.

A ello siguió una serie de enfrentamientos violentos con miembros de la organización islamófoba Pro-NRW, cuyo centro de operaciones está en el populoso estado de Renania del Norte-Westfalia, y que llevó a cabo una provocadora exposición de caricaturas de Mahoma en las cercanías de diversas mezquitas.