Bruselas advierte que el rescate a la banca española "no es un cheque en blanco"
- El portavoz de la CE: antes de inyectar dinero se tendrá en cuenta la situación de cada banco
- Altafaj asegura que la liquidación de una entidad es "un caso extremo"
La Comisión Europea ha advertido este viernes que el rescate de hasta 100.000 millones de euros que recibirá España para recapitalizar su banca no es "un cheque en blanco" para los bancos, y ha asegurado que no se va a inyectar dinero público en cualquier entidad "sea cual sea su situación" y cuando se han tomado decisiones "arriesgadas" y "erróneas" en el pasado.
En una entrevista en Gestiona Radio, el portavoz de Asuntos Económicos y Monetarios, Amadeu Altafaj, ha explicado que los planes de reestructuración del sector bancario español puede pasar por distintas alternativas, ya que lo importante es preservar los intereses de la economía y de los ciudadanos españoles, y ha incidido en que la liquidación de una entidad es "un caso extremo".
Apoya así las declaraciones del comisario de Competencia, el español Joaquín Almunia, que este miércoles advirtió que la liquidación de una entidad es "normal (...) cuando el coste de reestructurar es superior al coste de vender sus activos".
"Deben tratar de solucionar sus problemas por otros medios"
En este sentido, ha apuntado que el tipo de interés que se cobrará a los bancos a cambio de la ayuda -que en otros países se ha establecido en torno al 8,5%- es "disuasorio" y pretende que las entidades intenten solucionar sus problemas por otros medios como ventas de activos o fusiones, antes de "tender la mano para recibir dinero público".
Así, ha añadido que, cuando no sea posible hacer frente con soluciones de mercado a los problemas de la entidad, se deberá evaluar la posibilidad de salvar a estos bancos con dinero público, porque la alternativa tendría consecuencias importantes para la economía española.
Respecto a las tensiones vividas en los mercados en los últimos días, Altafaj ha indicado que obedecen a un "conjunto de factores", como la incertidumbre en torno a todo lo que rodea las elecciones de Grecia o el nerviosismo que arrastran los mercados desde hace tiempo.
El portavoz comunitario ha recalcado que, aunque no se conocen los detalles de la ayuda a la banca, "no hay tantas incógnitas" sobre la misma como se dice, y ha confiado en que, cuando se conozca el resultado de las evaluaciones de los auditores independientes, se produzca "un poco más de calma".
El rescate a la banca no debe mezclarse con el esfuerzo fiscal del país
Por otro lado, Altafaj ha insistido en que la ayuda financiera concedida a España solo tiene condiciones que se ciñen al sector bancario, por lo que ha instado a no mezclarlas con los esfuerzos que debe hacer el país para reconducir las cuentas públicas y llevar a cabo reformas económicas y estructurales para potenciar el crecimiento y el empleo, como cualquier otro país con déficit excesivo. "Son procesos que discurren por caminos distintos", ha asegurado.
Ha incidido en que España debe intentar, sobre todo, no "cargar las tintas" en la fiscalidad sobre el trabajo, y tampoco sobre el capital, y ha aconsejado que se exploren vías a través de impuestos indirectos como el IVA, las tasas medioambientales o los impuestos a las grandes fortunas.
Asimismo, Altafaj ha destacado que en Bruselas existe una percepción "clara" de que España está acometiendo "con determinación" reformas importantes, que quizás deberían haberse puesto en marcha antes. "Se constata una determinación no solo del Gobierno, sino de un país entero que está haciendo frente a una situación difícil con un temple digno de mención", ha agregado.
Con la voluntad de alcanzar los eurobonos ya se lograría confianza
Por otra parte, el portavoz del comisario Olli Rehn ha subrayado el deseo de la Comisión Europea de que cualquier discusión sobre los eurobonos o cualquier otro mecanismo se ponga sobre el papel para aportar más claridad y lograr más confianza en el euro. "La simple claridad sobre la voluntad de llegar a los eurobonos, que no es otra cosa que mutualizar la emisiones de deuda pública, aportaría mucha confianza en esta crisis", agregó.
Respecto a Grecia, ha advertido que el gobierno que salga de las elecciones del domingo asumirá la "responsabilidad histórica" de reformar la economía, reducir la deuda hasta niveles sostenibles y crear las bases para un crecimiento sostenible. Además, ha añadido que debe entenderse con sus socios europeos y corresponder a la ayuda financiera con ajustes y reformas económicas.
En este sentido, ha resaltado que el programa acordado para Grecia supone un ajuste "duro", pero es creíble y no hay "alternativa más dulce". Así, ha agregado que el "único plan" en Europa es que Grecia siga en el euro y que la Comisión seguirá apoyando a todos los países que estén presionados por los mercados, como Grecia, España o Italia.