Jorge Drexler, ese genio que brilla tanto en la gran pantalla como en los escenarios
Este viernes se estrena en España La suerte en tus manos, premiada en Tribeca
- Dirigida por Daniel Burman, habla de amor, juego y mentiras
“Si para hacerlo bien hay que pasarlo mal, lo hice mal, porque lo pasé bien”. Son las palabras de Jorge Drexler durante la presentación de la última película de Daniel Burman, La suerte en tus manos, coproducción argentino-española ganadora del premio al mejor guión en el Festival de Cine de Tribeca.
El cantautor uruguayo, ganador de un Oscar y un Goya por las canciones de Diario de motocicleta y Lope, continúa su exitoso idilio con el mundo del cine, ahora como protagonista de la novena cinta del cineasta argentino, su primer papel en la pantalla grande que –según reconoce– le ha hecho disfrutar de verdad.
Disfrute que, desde luego, ha ido acompañado de una excelente interpretación. Drexler encarna en la película a Uriel, un joven divorciado y con dos hijos que se quiere hacer la vasectomía porque ve en ella una solución para dejar de sufrir. Eso, para empezar.
“Dejar de ser yo mismo ha sido un regalo”
“Además de tener que cortarme las uñas de la mano derecha, cosa que no hacía desde los 16 años y que me obligó a renunciar a estar cómodo con la guitarra, esta película me ha dado la oportunidad de dejar de ser yo mismo. Y me ha encantado hacerlo, porque tengo un trabajo muy narcisista, el de escribir canciones sobre mi propia experiencia, poner mi foto con mi nombre, salir al escenario… Así que dejar de ser uno mismo durante un tiempo es un regalo maravilloso. Yo así lo viví. Ha sido muy terapéutico. Me ha enriquecido mucho”, explica, encantado, el uruguayo.
La suerte en tus manos habla, entre otras cosas, de la mentira. De la mentira cotidiana, esa a la que todos recurrimos alguna vez cuando decimos cosas tan simples como “estoy llegando” y aún no hemos salido o como “trabajo en el mundo del espectáculo” cuando en realidad nos da vergüenza admitir que lo que de verdad nos gusta es el póquer, a lo que dedicamos nuestro tiempo.
“La verdad absoluta no existe. Uno no tiene tiempo para decir todo lo que tiene en la cabeza. Filtramos todo el tiempo lo que pensamos y eso es trabajar con verdades parciales. La película trata de hasta dónde se puede alterar la verdad teniendo una relación”, afirma Drexler.
Acompañado en el reparto por Valeria Bertucelli (Gloria) y Norma Aleandro (Susan), el filme intenta sumirnos también en el juego de roles que todos interpretamos, a veces sin darnos cuenta. “Uno, cuando es maduro tiene que hacer de padre, de marido, de jefe y demás. Y al final no sabe bien lo que hace, pero interpreta”, aclara Burman, reconocido a sus 39 años con premios como el Oso de Plata del Festival de Berlín por El abrazo partido.
Uriel, el protagonista, ha construido lo que casi todo el mundo anhela (pareja, casa, hijos y tiempo libre) pero, cuando se da cuenta de lo que tiene una vez que se divorcia, se enfrenta a empezar de nuevo, lo que le produce verdadero vértigo.
"Nunca sentí que fuera un riesgo trabajar con Jorge"
“El guión era tan bueno… Lo empecé a leer después de rechazar el papel que Daniel me ofreció y, desde la primera página, me descubrí a mí mismo leyendo en voz alta”, reconoce Drexler. Burman, por su parte, supo que el cantante era el perfecto Uriel mientras escuchaba un concierto de Drexler.
“Nunca sentí que fuera un riesgo trabajar con Jorge. Él no necesita esta película para salir en los periódicos. Lo que ocurrió es que fui a escucharlo a un recital en Barcelona y lo observé cantando una canción en la que trataba un tema que yo sabía que había superado totalmente. Así que pensé: “si lo tienes superado… ¿por qué cantas así?” Por eso pensé que él sería un buen protagonista de mi película. Y me entraron ganas de parar el concierto y ofrecerle el papel”, afirma el director.
Sobre si esta será su única película como actor o habrá más, Drexler confiesa que él no es actor y que no tiene “ni idea” de si puede hacer otra película. Pero si esta es, como él afirma, su primera incursión en el mundo de la interpretación, bienvenidas sean las siguientes.