Grecia pedirá al Eurogrupo una prórroga para cumplir el rescate entre el rechazo de algunos Estados

• Austria, Finlandia y Holanda ya han mostrado su oposición a dar más tiempo
• Tendría un coste para la UE de entre 16.000 y 20.000 millones de euros
• La negociación entre ambas partes se producirá en verano

Grecia pedirá este jueves a sus socios del Eurogrupo que le den dos años más para cumplir sus objetivos fiscales en respuesta a la enorme presión popular para suavizar las condiciones del rescate y en cumplimiento del compromiso adoptado por los tres partidos que acordaron el pasado miércoles un gobierno de coalición.

Sin embargo, ya hay varios Estados miembros de la zona euro -entre ellos Finandia, Austria y Holanda- que han mostrado su oposición a flexibilizar el calendario de ajustes, a pesar de que en los últimos días algunos líderes habían comenzado a abrir la puerta una flexibilización.

"No creo que sea una buena idea", ha asegurado preguntada al respecto la  ministra finlandesa de Finanzas, Jutta Urpilainen, a su llegada a la  reunión del Eurogrupo que se celebra en Luxemburgo. Su homólogo holandés, Jan Kees de Jager, ha subrayado que los griegos  no tienen "alternativas a la reforma". "Con medidas más inteligentes se puede lograr más y eso es bueno,  pero no hay una alternativa a las reformas duras y dolorosas", ha  asegurado. Por su parte, la ministra austríaca, Maria Fekter, ha señalado que lo  primero será ver la desviación que ha sufrido Grecia en el camino para  cumplir sus objetivos durante la pasada campaña electoral. "Si se desvió mucho, Grecia tendrá que trabajar aún más duro", ha señalado.

La petición, que supondría entre 16.000 y 20.000 millones de euros adicionales al rescate, amenaza con provocar el primer enfrentamiento serio del primer ministro heleno, Antonis Samarás.El primer mensaje en este sentido lo comunicará esta misma tarde el ministro de Economía en funciones, Georges Zanias, que representa a Atenas antes de la inminente toma de posesión del nuevo gabinete.

El diario económico Naftemporiki considera la reunión de este jueves en Luxemburgo "la primera prueba" para las negociaciones, que fueron tildadas de " gran batalla" por el líder del Pasok, una de las formaciones que apoyan al gobierno, Evangelos Venizelos.

"La troika contra la troika", resumía la situación el diario de centro-izquierda Ta Nea, en referencia a los tres prestamistas internacionales (Unión Europea, Banco Central Europeo y Fondo Monetario Internacional) con los tres partidos que conforman el gobierno (Nueva Democracia, Pasok y Dimar).

Pero la persona que tendrá que hacer frente a esta batala será el mayor banquero del país y  antiguo asesor del ex primer ministro Costas Simitis, Vassilios Rápanos, que será el nuevo ministro de Economía heleno.

Negociaciones en Julio y Agosto

Aunque la reunión del Eurogrupo será una primera toma de contacto, las negociaciones 'a cara de perro' se producirán en los meses de julio y agosto.

El programa de ayuda a Grecia es "ampliamente fuera de control" y debe ser  "renegociado" este verano, eligiendo entre nuevas medidas de  austeridad, según ha reconocido a Afp Thomas  Wieser, un responsable de la zona euro.

La reivindicación griega de una prórroga de dos años figura en el programa acordado por los tres partidos que sustentan al nuevo gobierno y contiene otras reivindicaciones como una prórroga de la ayuda a los desempleados ante la alta tasa de paro que sufre el país, de forma que pase de uno a dos años.

"Obtener un restraso no será difícil pero implicará una nueva ayuda de 20.000 millones de euros hasta 2015 porque Grecia no podrá volver a los mercados para vender sus bonos", ha explicado a Afp un antiguo asesor de Lukás Papadimos, que dirigió el ejecutivo tecnócrata que se hizo con los mandos del país hasta las elecciones celebradas el pasado mes de mayo.

El acuerdo político entre el 'tripartito' heleno establece los términos de una difícil negociación con los socios de la Unión Europea, especialmente Alemania, que ha ofrecido algunas modificaciones leves pero no cambios radicales en la línea de crédito de 130.000 millones de euros acordada.

Un retraso suplementario de dos años

Desde 2010, la zona euro y el Fondo Monetario Internaional han desbloqueado dos paquetes de ayudas -rescates-, el primero con un montante de 110.000 millones de euros y otro de 130.000 millones,  que incluye una quita de acreedores privados de 107.00 millones.

En contrapartida,  Atenas se comprometió a volver al equilibrio presupuestario de aquí a 2014, con la posibilidad de ganar un año si la economía sufría una fuerte receisón.

El primer argumento de Grecia para revisar el memorándum con Bruselas es que la falta de un mando político en los meses en los que ha habido campaña electoral -y que se han tenido que prolongar más de lo previsto debido a la repetición de los comicios por la imposibilidad de formar gobierno en la primera ocasión- ha impedido que se tomen las medidas adecuadas, de forma que el país incluso podría entrar en bancarrota a medios de julio si no recibe nuevos tramos de ayuda.

Grecia quiere por tanto un retraso suplementario de dos años para cumplir sus debres financieros, con retorno al superávit presupuestario en 2016 en vez de 2014.

El presidente del Eurogrupo, el luxemburgués Jean-Claude Juncker, advirtió el pasado martes de que no habrá cambios profundos en el programa de ayuda a Grecia aunque pudiera haber modificación en los plazos.

"Le he explicado (a Samarás) que no habrá modificación sustancial", aseguró.