El Tribunal Constitucional de Rumanía aprueba la destitución de Basescu como presidente

• El jefe del Estado fue destituido el pasado viernes por el Parlamento 
• Su destitución significa la mayor crisis política en Rumania desde Ceacescu

El Tribunal Constitucional de Rumania ha aprobado este lunes la destitución del jefe del Estado, Traian Basescu, y ha nombrado al líder de la coalición de centro-izquierda en el poder, Crin Antonescu, como presidente interino.

"El Tribunal considera que el procedimiento de suspensión del cargo de Presidente de Rumania, Traian Basescu, se respeta (...) y las funciones de presidente interino estarán a cargo de Crin Antonescu", ha señalado en su sentencia.

El Tribunal, sin embargo, considera "inconstitucional" una ley que limita sus facultades de control sobre las decisiones del Parlamento.

Una amplia mayoría del Parlamento votó este viernes a favor de destituir  al presidente del país por  supuesta violación continuada de la Constitución.

En un referéndum, que se celebrará el próximo 29 de julio, la  ciudadanía decidirá sobre la continuidad de Basescu, a quien el Gobierno de  centro-izquierda acusa, entre otras cosas, de no respetar la separación de  poderes, socavar la independencia judicial y usurpar el rol del Ejecutivo.

"Lo que están haciendo desde hace dos semanas no es sino un golpe al  Estado de derecho, creo que es un error y que tendrá consecuencias a  largo plazo", aseguró durante el pleno Basescu, quien ha acusado a la coalición  de Gobierno de querer controlar la justicia y las instituciones del Estado.

Embajadores extranjeros acreditados en Bucarest, el presidente de la Comisión  Europea y del Consejo Europeo y la comisaria europea de Justicia han mostrado su  preocupación por la independencia judicial ante los acontecimientos en  Rumanía.

Disputa de poder

La disputa entre la presidencia y el Gobierno ha monopolizado el  debate político en el país, que celebra en otoño elecciones  legislativas con la USL del primer ministro Ponta como clara favorita.

En el poder desde 2004, el presidente Basescu se enfrenta a su  segundo procedimiento de destitución. En 2007, el voto popular en el  referéndum lo ratificó en el cargo después de que el Parlamento votara para  destituirle.

Basescu, un hombre carismático y directo que llegó al poder con la promesa de  acabar con la corrupción y modernizar el país, afronta este procedimiento con  una popularidad mucho más baja que en 2007.

El presidente ha pagado haber llevado a cabo las políticas de austeridad más  duras del continente, así como su incapacidad para instituir un Gobierno estable  y su enorme influencia sobre los Ejecutivos anteriores.