La Corte Penal Internacional condena al congolés Lubanga a 14 años por reclutar a niños
- En junio pasado la fiscalía pidió la pena máxima de 30 años
- Ya había sido declarado culpable el pasado marzo
- Participó en la Segunda Guerra del Congo y en el conflicto étnico posterior
La Corte Penal Internacional (CPI) ha condenado este martes al ex líder rebelde congolés Thomas Lubanga a 14 años de prisión por reclutar a niños soldado entre 2002 y 2003 en la República Democrática del Congo.
Los magistrados ya habían declarado culpable a Lubanga en marzo pasado al concluir que se había demostrado "sin lugar a dudas" que el acusado era responsable del alistamiento de menores de 15 años en un conflicto armado, y en junio pasado la fiscalía pidió la pena máxima de 30 años de prisión para Lubanga.
El 10 de febrero de 2006, la Corte Penal Internacional (CPI) dictó su detención por reclutar y utilizar como soldados a niños menores de 15 años entre septiembre de 2002 y agosto de 2003. El 17 de marzo siguiente, Lubanga se convirtió en el primer detenido por orden de la CPI y fue trasladado al centro de detención de La Haya (Holanda).
El juez Adrian Fulford ha precisado, durante una audiencia pública celebrada en La Haya, que los magistrados han decidido tener en cuenta como atenuante la cooperación constante de Lubanga con el Tribunal a pesar de que el comportamiento de la fiscalía le sometía a una gran presión.
Se trata de la primera condena de la historia dictada por la CPI, que ha tardado casi diez años en resolver el caso. La defensa del exlíder rebelde congolés tendrá ahora la posibilidad de recurrir tanto el veredicto de culpabilidad como el relativo a la pena impuesta.
Los crímenes de Lubanga
En agosto de 2002, los hombres de Lubanga tomaron Bunia (capital de Ituri), apoyados por tropas ugandesas, causando al menos cien muertos, según distintas fuentes, y numerosas atrocidades. Entre diciembre de 2002 y comienzos de 2003 atacaron las localidades mineras de Kilo, Kobu, y Sipri.
Según la organización pro derechos humanos Human Rights Watch, solo en Kilo fueron asesinados a martillazos un centenar de civiles Lendu a quienes se les obligó a cavar sus propias tumbas.
Tras las masacres, de las que Lubanga está considerado autor intelectual, tropas francesas fueron desplegadas en la región en junio de 2003, bajo mandato de la ONU (Operación Artemis). En ese mismo año, Lubanga rompió con Uganda para aliarse con Ruanda y, ya en 2004, rechazó adherirse al acuerdo del fin de hostilidades en Ituri.
Tras el asesinato, en febrero de 2005, de nueve cascos azules de la ONU en Bunia, el Gobierno de la RDC ordenó capturar a los presuntos autores. El primer detenido fue el líder lendu Floribert Ndjabu y, el 19 de marzo siguiente, Lubanga fue capturado y confinado en la central prisión de Kinshasa, aunque en un principio fue recluido en uno de los hoteles más lujosos de la capital congoleña.