Hollande y Cameron apuestan por una Europa a "distintas velocidades"
- Coinciden en que se aplique "con rapidez" los acuerdos del Consejo Europeo
- Ambos mandatarios se reúnen para hablar de la eurozona
- Es la primera visita oficial de Hollande como presidente a Londres
El primer ministro británico, David Cameron, y el presidente francés, Francois Hollande, han escenificado este martes en Londres su posición en favor de una estrategia de crecimiento en Europa, defendiendo la necesidad de que puedan coexistir "distintas velocidades".
"Necesitamos desarrollar una Europa con múltiples velocidades, donde cada uno pueda ir a su ritmo", ha apuntado Hollande durante una rueda de prensa compartida con el primer ministro británico tras un almuerzo en Downing Street.
El conservador Cameron ha apuntado por su parte que coincide con el socialista Hollande en la necesidad de que el euro sea una moneda "fuerte y estable", y en que se apliquen "con rapidez" los acuerdos del reciente Consejo Europeo.
Al término de un almuerzo en Londres, en el que han hablado sobre la estabilidad financiera de la eurozona, ambos dirigentes, cuyas posturas ideológicas difieren, han indicado que Francia y el Reino Unido son dos socios que mantienen una relación "valiosa y esencial", basada en "intereses comunes".
Cameron ha dicho que los presupuestos de los países de la UE no deben crecer "hasta niveles inaceptables" pues "no hay que gastar más, hay que gastar mejor", en lo que ha asegurado también que mantiene coincidencias con Hollande.
Ha sido la primera reunión en Londres de ambos políticos desde que Hollande fue elegido presidente francés en mayo, después de que durante la campaña electoral Cameron no recibiese al líder socialista galo en una visita a la capital británica.
En la rueda de prensa, tanto Cameron como Hollande han admitido sus diferencias ideológicas y sus distintas visiones sobre el futuro de la Unión Europea (UE) pero han señalado, en palabras del "premier" británico, que son políticos "razonables y prácticos" que "quieren lo mejor para sus países", que tienen "intereses comunes".
Coincidencias y discrepancias
En mayo pasado, durante la reunión del G20 en México, David Cameron llegó a decir que pondría una "alfombra roja" a las empresas francesas que se marchasen al Reino Unido, huyendo de los altos impuestos para las rentas altas decididos por Hollande.
Al ser preguntado sobre sus diferencias en el pasado, el presidente francés lo ha achacado este martes a "dinámicas propias de las campañas electorales", que ha asegurado comprender, pero ha destacado que ambos son ahora jefes de Estado que buscan lo mejor para sus países.
En este sentido, Cameron se ha explayado al señalar las coincidencias en política internacional entre Francia y el Reino Unido en asuntos como Siria, Libia, Irán, defensa y política energética, si bien ha admitido discrepancias en cuanto a la regulación de la City (centro financiero) de Londres.
En este sentido, Hollande ha opinado que escándalos recientes como el de la manipulación del Libor -tipo de interés interbancario fijado en Londres- por parte de Barclays muestran la necesidad de "controlar" y "regular" al sector financiero, mientras Cameron ha abogado para que el Reino Unido sea el país "más competitivo" y "el mejor lugar para los negocios".
En cuanto a la crisis europea, el "premier" británico ha opinado que la eurozona "tiene que integrarse más" y que los países de la UE pueden mantener "relaciones distintas", si bien ha admitido, como ha hecho otras veces, que Londres "no está contento con la relación actual".