El presidente de Rumanía entrega temporalmente el poder tras la decisión del Constitucional

• La Corte avaló la decisión del Parlamento de cesarle en el cargo
• La decisión tiene que ser respaldada en referéndum para tener efecto

El presidente de Rumanía, Traian Basescu, ha entregado temporalmente este martes el poder a su rival, el presidente del Senado, Crin Antonescu, después de que este lunes el Tribunal Constitucional avalase la decisión del Parlamento de suspender sus poderes por presunta violación de la Constitución.

La trasferencia de poderes se ha llevado a cabo a puerta cerrada y sin ninguna declaración. Antonescu es el presidente de la Unión Social-Liberal (USL), una coalición de socialdemócratas y liberales, que llegó al poder en mayo, informa Afp.

El Tribunal Constitucional reconoció como presidente interino al actual presidente del Senado, el liberal Crin Antonescu, que comparte la dirección de la coalición gubernamental de socialdemócratas y liberales, y que ha iniciado el proceso de revocación del presidente.

El pasado viernes, un total de 258 legisladores del Parlamento votaron a favor de su revocación, mientras que 116 se manifestaron en contra, uno se abstuvo y hubo un voto nulo.

No obstante, los rumanos tendrán ahora la última palabra. El próximo 29 de julio Rumanía deberá decidir en referendum si Basescu agota su mandato hasta 2014 o si por el contrario se consuma su destitución y se convocan elecciones anticipadas. Hasta que se tome esa decisión el presidente rumano se encuentra suspendido y no ejercerá sus funciones.

Guerra sin cuartel

El procedimiento de revocación de Basescu es el punto culminante de la guerra sin cuartel entre éste y el primer ministro rumano, el socialdemócrata Victor Ponta. Basescu ya afrontó en 2007 un procedimiento de revocación, que se saldó entonces con un triunfo abrumador en un referéndum en plena ola de popularidad.

Las severas políticas de austeridad impulsadas por el presidente, su enorme influencia sobre los diferentes gobiernos conservadores y la constante inestabilidad política durante sus mandatos han generado hostilidad hacia el jefe del Estado, suspendido por buena parte de la sociedad rumana.

Así lo demuestran los catastróficos resultados del conservador, opositor y aliado de Basescu Partido Democrático Liberal (PDL) en los comicios municipales de hace un mes.

Rumanía celebrará elecciones legislativas el próximo otoño, con la gobernante coalición USL de Ponta como máxima favorita.