Rusia propone ampliar tres meses el mandato de los observadores de la ONU en Siria

• Moscú hace circular un nuevo proyecto de resolución en el Consejo de Seguridad
• No impone sanciones al régimen de Bachar al Asad

Rusia ha presentado este martes en el Consejo de Seguridad de la ONU un proyecto de resolución sobre Siria que propone ampliar tres meses el mandato de la misión de observadores en el país árabe (UNSMIS), y que no incluye la amenaza de sanciones al régimen del presidente Bachar al Asad.

"Es toda una sorpresa, un proyecto de resolución inesperado", ha dicho a Efe un diplomático del Consejo sobre la propuesta rusa, al tiempo que ha afirmado que los países occidentales del máximo órgano internacional de seguridad "siguen trabajando" en su propia resolución.

Moscú ha hecho circular su propuesta de resolución un día antes de que el enviado especial de la ONU para Siria, Kofi Annan, informe al Consejo de Seguridad sobre sus recientes contactos con el régimen de Damasco para iniciar un diálogo en el país, así como con los vecinos Irak e Irán.

"El borrador incluye las recomendaciones de cambio que ha hecho el Departamento de Operaciones de Paz de la ONU, pero como mínimo necesita combinarse con algún tipo de presión real a las partes", según ha detallado a Efe otra fuente diplomática del Consejo de Seguridad.

Garantizar que se implementa el plan de paz

La misma fuente ha indicado que el objetivo de la UNSMIS es garantizar que se implementa el plan de paz de seis puntos elaborado por Annan y que la presencia de los observadores internacionales en el país "no puede ser el último objetivo" que se marque el Consejo de Seguridad.

"El Consejo debe responder a la situación en Siria en un sentido más amplio", añadió la misma fuente, que detalló que el texto propuesto por Rusia no incluye ninguna amenaza de sanción al régimen de Al Asad como las que contempla el capítulo VII de la Carta de Naciones Unidas.

El borrador que ha hecho circular Rusia entre los miembros del Consejo de Seguridad solicita a los estados miembros de la ONU y a todas las partes en Siria que cumplan con los puntos incluidos en el plan de transición que planteó el Grupo de Acción para Siria en su reunión del pasado 30 de junio en Ginebra.

Francia considera que el proyecto está "por debajo" de la expectativas

Por su parte, Francia ha considerado que el proyecto presentado por Rusia está "por debajo" de las expectativas de "gran parte" de la comunidad internacional. Además, París ha criticado que la propuesta rusa no incluye la amenaza de sanciones al régimen del presidente sirio, Bachar al Asad.

Un portavoz del Ministerio ha recordado que el grupo de amigos de Siria, reunido el pasado 6 de julio en París "en presencia de más de la mitad de Estados del planeta", había llamado claramente a pasar a una etapa superior en la presión sobre el Gobierno sirio para apoyar las recomendaciones del enviado especial de la ONU, Kofi Annan.

"Desde ese punto de vista, está claro que el proyecto de resolución ruso está por debajo de las expectativas de gran parte de la comunidad internacional", se ha lamentado desde su departamento, donde se consideró "indispensable" aplicar de manera inmediata el plan de transición decidido la semana pasada en Ginebra.

"Es imperativo también el cese de la violencia, comenzando por la retirada de las ciudades de las tropas y de las armas pesadas de las fuerzas de seguridad sirias y el fin de la represión ejercida por las autoridades contra la oposición pacífica".

Un gobierno transitorio

El Grupo de Acción para Siria, integrado por China, Rusia, EE.UU., Francia, el Reino Unido, Turquía, la Liga Árabe, la ONU y la UE, propone formar un gobierno transitorio que incluya a figuras del régimen y de la oposición, que inicie la transición para poner fin a un conflicto que dura ya dieciséis meses.

Además, el proyecto de resolución ruso vuelve a pedir a las partes que cumplan con el plan de paz del ex secretario general de la ONU, por lo que exhorta al "cese inmediato de toda violencia armada en todas sus formas", al tiempo que muestra su preocupación por el deterioro de la situación humanitaria en Siria.

El pasado viernes, el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, ya propuso al Consejo de Seguridad que reduzca el número de observadores desplegados en Siria y que le dé un enfoque más político, destinado a facilitar el diálogo entre las partes, algo que deben estudiar los países antes de que el mandato de los militares desarmados expire el próximo 20 de julio.

Reunión en Moscú con el CNS

Mientras, en Moscú, una delegación de la principal organización siria opositora en el exilio, el Consejo Nacional Sirio,  se ha reunido con el ministro de Exteriores ruso, Sergei Lavrov. En esa reunión, los opositores han manifestado que "los acontecimientos en Siria no son sólo los desacuerdos entre la oposición y el gobierno, sino una revolución", informa Afp.

La "revolución" en Siria "es similar a lo que sucedió en Rusia cuando se embarcó en el camino de la democracia", y ha dicho el jefe del CNS, en presencia de los periodistas.

Por su parte, el jefe de la diplomacia rusa ha manifestado que Moscú quiere " averiguar si hay posibilidades reales para una unión de todos los grupos de la oposición sobre la base de un diálogo con el gobierno, según lo previsto en el Plan aprobado por el Consejo de Seguridad de la ONU ", ha dicho Lavrov.

Deserta el embajador sirio en Irak

Mientras, según han informado fuentes de la oposición, el embajador de Siria en Irak ha desertado en señal de protesta por la represión emprendida por el régimen de Al Asad en los más de 16 meses de revueltas, según informa Reuters.

De confirmarse, Nawaf Al-Fares, que estaba estrechamente vinculado con el establecimiento de la seguridad, sería el primer diplomático de alto rango de Siria que deserta. Al-Fares es originario de la localidad de Deir al-Zor, que ha sido escenario de algunos de los ataques militares más feroces de las fuerzas de Asad.