Annan condena la masacre en Treimsa y el uso de armas pesadas por el régimen
- El enviado de la ONU denuncia que el régimen se comprometió a no hacerlo
- Francia pide al Consejo de Seguridad que asuma responsabilidades
El enviado especial de la ONU y la Liga Árabe para Siria, Kofi Annan, ha condenado este viernes la nueva masacre en Treimsa, en la que han muerto, según la oposición siria, unas 200 personas, y ha acusado al Gobierno de Damasco de usar armamento pesado en las ciudades, a pesar de que se había comprometido a no hacerlo.
"Condeno estas atrocidades en los términos más severos posibles", ha afirmado Annan en un comunicado, en que ha señalado que la presencia del Ejército en Tremseh "es una violación de la garantía del gobierno de que cesaría en el uso de armas pesadas en centros de población y de su compromiso con el plan de seis puntos", según informa Efe.
"Estoy consternado y horrorizado sobre las noticias que vienen de Triemsa, cerca de Hama, de intensos enfrentamientos, muchas víctimas, y la confirmación del uso de armamento pesado como artillería, tanques y helicópteros", ha agregado el enviado. La oposición siria acusa al régimen de Bachar al Asad de haber cometido la matanza en Tremseh, pero el gobierno afirma que fueron fuerzas terroristas quienes perpetraron la masacre.
El ex secretario general de la ONU ha señalado que lo ocurrido en Tremseh "es un nuevo recordatorio de la pesadilla y los horrores a los que están sujetos los civiles en Siria". Annan ha afirmado que los 300 cascos azules desarmados que forman la misión de la ONU en Siria (UNSMIS) están listos para ir a verificar los hechos "cuando las circunstancias lo permitan" y ha añadido que "La libertad de movimientos de los observadores debe respetarse", ha agregado.
Francia y Reino Unido piden a la ONU mayores acciones
La Casa Blanca ha manifestado que estas “atrocidades” realizadas por las tropas de Asad deben despejar cualquier tipo de duda sobre la necesidad de coordinar una respuesta internacional por parte de Naciones Unidas.
El portavoz de la Casa Blanca ha manifestado este viernes que los “actos repetidos de violencia contra el pueblo sirio" demuestran que Asad ha perdido la legitimidad para liderar, informa Reuters.
Por su parte, Francia ha manifestado este viernes que, si se confirma la masacre, es una nueva muestra de “la huida hacia delante del régimen asesino” y ha vuelto a pedir al Consejo de Seguridad que “asuma la responsabilidad”, apunta Afp.
"Es hora de que todas las personas a asuman la responsabilidad, para que Francia tome el suyo," ha dicho el portavoz del Ministerio de de Relaciones Exteriores, Bernard Valero, en una clara referencia a Rusia y China, principales respaldos diplomáticos del régimen de Damasco que hasta ahora han bloqueado las iniciativas presentadas en la ONU para endurecer las sanciones contra el Gobierno de Bachar al Asad.
En términos similares se ha manifestado el ministro británico de Asuntos Exteriores, William Hague, quien ha calificado de "espantosa" y "terrible" la masacre en Tremseh. Mediante un comunicado divulgado este viernes, Hague señala que es necesario establecer lo ocurrido para que sus responsables respondan por sus actos y también ha considerado necesaria una acción urgente del Consejo de Seguridad de la ONU.
"Para ello, la misión de la ONU en Siria debe tener acceso a Tremseh rápidamente y sin obstáculos para que pueda llevar a cabo una investigación independiente sobre lo ocurrido y quién ha sido responsable", ha afirmado el jefe de la diplomacia británica.
"El momento ha llegado para una acción diplomática decisiva que ponga fin de manera pacífica a la violencia. Todos los miembros del Consejo de Seguridad deben compartir su responsabilidad para alcanzar esto", agrega la nota de Hague.
Rusia pide una investigación
Por su parte, también Rusia ha condenado este viernes la masacre. El portavoz portavoz de la Cancillería rusa ha condenado la matanza y ha demandad una investigación de los hechos para dirimir responsabilidades. "Condenamos firmemente ese crimen sangriento. Como en otras ocasiones, los contendientes en el conflicto sirio se culpan unos a otros", ha asegurado Lukashévich a la agencia Interfax.
Lukashévich agregó que Rusia "no alberga dudas de que este crimen le conviene a aquellas fuerzas que no buscan la paz e instigan continuamente la semilla de la hostilidad interconfesional y el conflicto civil". El diplomático ha subrayado que "para esas fuerzas el dolor y el sufrimiento del pueblo sirio no significa nada".
El conflicto ya ha causado más de 11.000 muertos, más de 100.000 refugiados, y 200.000 civiles han debido abandonar sus hogares, aunque según la ONU un millón y medio de personas necesitan asistencia humanitaria.