Linde: "El Banco de España actuó con poca decisión y de modo insuficiente o inadecuado"
- El actual gobernador critica las fusiones frías y la timidez en las provisiones
- Ha dicho que los bancos inviables se liquidarán, lo que rechaza el Gobierno
El nuevo gobernador del Banco de España, Luis María Linde, ha reconocido que ese organismo supervisor del sistema financiero "actuó con poca decisión o de modo insuficiente o inadecuado" para prevenir la crisis del sistema. Además, ha dicho que las entidades que resulten inviables incluso tras las ayudas, serán liquidadas, algo que ha rechazado el ministro de Economía, Luis de Guindos.
Además, y ya en respuesta a los periodistas en los pasillos del Congreso, Linde ha subrayado que la intervención del BCE en el mercado secundario para comprar deuda española no es urgente, porque el impacto de la prima de riesgo en las cuentas públicas "no es dramático".
Respecto a los fallos en la supervisión, el actual responsable del Banco de España ha señalado tres errores: las fusiones frías, las insuficientes provisiones anticíclicas y la falta de previsión de una doble recesión que afectó a la calidad de los test de estrés realizados en la zona euro en 2010 y 2011.
"En los años de burbuja inmobiliaria y financiera que acabó en 2008, había una especie de euforia -no solo en España sino en todos los países de la zona euro y EE.UU.- que llevaba a no ver -o no querer ver- los riesgos que se estaban acumulando. Era como si nadie quisiera prever escenarios de recesión, de subida de tipos de interés o de colapso de la financiación", ha recordado el actual responsable del banco central.
Linde ha insistido en que "el Banco de España no ha tenido éxito en su labor de vigilancia macroprudencial en los últimos diez años", algo de lo que se siente participante porque -ha remarcado- él ha estado dentro del órgano supervisor todo ese tiempo.
Durante su primera comparecencia en el Congreso de los Diputados desde su nombramiento, el pasado 11 de junio, Linde ha señalado que este análisis a posteriori "se hace desde la fácil lucidez de mirar hacia el pasado desde el presente y, por supuesto, sin querer dar ninguna lección a nadie".
Fusiones para evitar quejas autonómicas y provisiones insuficientes
A juicio de Linde, los Sistemas de Institucionales de Protección (SIP) -las llamadas fusiones frías- no consiguieron su objetivo de reforzar las entidades con problemas. Se crearon -ha añadido- "para evitar o soslayar las dificultades políticas planteadas desde las comunidades autónomas y otras dificultades planteadas desde las propias entidadades", y su efecto final "no fue demasiado positivo y contribuyó más bien a retrasar decisiones y ajustes".
Otro de los puntos en los que se falló fue en las provisiones anticíclicas, una cuestión en la que el Banco de España "fue pionero" en Europa y en el mundo, pero a las que "se vio obligado, si no a renunciar del todo, sí a hacerlo en parte", ha indicado el gobernador del instituto regulador.
"Desde la perspectiva de hoy, muchos estarían de acuerdo en que el defecto principal de aquella norma era su timidez y su insuficiencia para contener el crecimiento excesivo del crédito", ha señalado.
Por ese motivo, Luis María Linde ha considerado que "todos habríamos salido ganando si se hubieran mantenido y generalizado, tal y como el Banco de España defendió a comienzos de los años 2000, y si se hubieran hecho incluso más exigentes".
Como tercer error, el responsable del banco central ha recordado que "casi nadie previó la doble recesión, algo que afectó, sin duda, a la calidad de los test de esfuerzo que el Banco de España llevó a cabo en 2010 y 2011 en el marco de las pruebas supervisadas por la Autoridad Bancaria Europea".
En conclusión, el Banco de España "debería haber sido más heterodoxo en su capacidad reguladora y supervisora para mitigar la vulnerabilidad del sistema financiero", ha matizado Linde.
La banca ha utilizado el equivalente al 20% del PIB para sanearse
Después de repasar las medidas puestas en marcha para impulsar el saneamiento de la banca, Linde ha aportado las cifras de lo que ha costado a las entidades españolas cumplir con las exigencias de provisiones de los decretos aprobados en febrero y mayo pasados: "El esfuerzo conjunto de los dos decretos se eleva a 59.000 millones de euros de provisiones y 11.000 millones de colchón de capital".
Con estas últimas medidas, el gobernador del Banco de España ha calculado que el sistema financiero español ha acometido "saneamientos por más de 200.000 millones de años en cinco años, a lo que hay que sumar los 11.000 millones de capital antes citados. Esto significa más de 20% de PIB español de 2011".
Además, Linde se ha referido al rescate europeo que recibirá España para reestructurar su sistema financiero. En ese punto ha explicado que, si algún banco "no tiene el pulso suficiente para asegurar su futuro, habrá de encarar un proceso de resolución o liquidación ordenada".
El gobernador ha subrayado que "una parte relevante del sistema financiero español está en disposición, sin recibir ayudas públicas, de mantener toda su actividad y contribuir de forma eficiente a la canalización de los flujos financieros de la economía". En esa línea, se ha mostrado convencido de que la evaluación detallada que están realizando cuatro consultoras a la banca española -y que se conocerá previsiblemente en septiembre- demostrará que hay un primer grupo de bancos que cumplirá sin recapitalizarse (las entidades más grandes y alguna más pequeña).
Otro segundo grupo, en el que se encuentran los bancos controlados por el FROB (BFA-Bankia, Catalunya Bank, NovaCaixaGalicia Banco y Banco de Valencia), concentrará las mayores necesidades de capital que se deriven del análisis.
Liquidación de entidades no viables
Linde ha indicado que el acuerdo negociado entre el Gobierno de España y las autoridades europeas establece que se segreguen los activos bancarios dañados en lo que se llama "banco malo", que -según ha explicado-, "posiblemente no sea un banco, sino una compañía o sociedad de gestión de activos".
Las entidades que no alcancen los niveles de capital, pero que puedan afrontarlos con planes de recapitalización que les permitan conseguir capital privado, integrarán el tercer grupo.
Y para ese grupo, Linde ha destacado que, "cuando dichas necesidades de capital adicional sean elevadas, es razonable que de forma temporal, reciban una inyección transitoria de fondos públicos en forma de capital contingente".
También respecto a la ayuda europea que recibirá el sector, el gobernador ha recordado que los bancos que reciban el crédito deberán emprender un proceso de reestructuración, "que se traducirá en ajustes de tamaño, eliminación de los segmentos de negocio no rentables, reequilibrio de las estructuras financieras, mejoras en la gobernanza y racionalización de las redes".
"En el caso de que alguna entidad no sea viable, se procederá a su resolución ordenada", ha señalado el gobernador, quien ha recordado que este proceso ya se ha llevado a cabo con otras entidades intervenidas como Caja Castilla La Mancha (CCM) Unnim, Cajasur o la Caja de Ahorros del Mediterráneo (CAM).
Sin embargo, casi a la misma hora, el ministro de Economía, Luis de Guindos, ha rechazado tajantemente que se vaya a liquidar ninguna entidad, algo que ya ha sugerido también la Comisión Europea. "Por supuesto que no", ha dicho.
"No urge" que el BCE compre deuda española
Ya fuera de la Comisión de Economía, en los pasillos del Congreso, el gobernador del Banco de España ha descartado que sea urgente la compra "inmediata" de deuda soberana española por parte del BCE. Linde sí ha avisado de que "en el futuro" podría ser una posibilidad "más necesaria".
En declaraciones a los periodistas, el nuevo gobernador justificó que "de momento" no urge la actuación del BCE en el mercado secundario de deuda pública, ya que -ha añadido- el impacto de la prima de riesgo española no es "tan dramático" sobre las cuentas públicas.
"No nos conviene un prima de riesgo tan elevada [por encima de los 500 puntos básicos], pero su impacto en las cuentas pública no es tan dramático como se piensa y es relativamente pequeño", explicó.
En este sentido, recordó que "no es imposible" que el banco presidido por Mario Draghi reactive el programa de compra de deuda soberana. "Pero ahora no va a ocurrir, que yo sepa", ha matizado.