La presión sobre España sigue batiendo récords, con el bono en el 7,5%
- La prima de riesgo, diferencial con el bono alemán, pasa de 630 puntos
- La Bolsa de Madrid cae un 1,1% y las otras grandes europeas más del 2%
- El índice llegó a hundirse el 5% y el regulador ha limitado la especulación
La deuda española sigue bajo una enorme presión. La rentabilidad que pagan los bonos españoles a 10 años ha llegado al 7,5%, un nuevo máximodesde la creación del euro, como la prima de riesgo, el diferencial de esa cifra respecto a la que paga Alemania. Además, las Bolsas europeas han vivido otra jornada de caídas, del 1,1% en el caso de Madrid y mayores en el resto.
Durante la sesión, el interés de los títulos españoles ha llegado a tocar los 7,56%, muy por encima del cierre del viernes (7,25%), cuando marcó un nuevo récord. Al final ha cerrado justo en el 7,50%.
Con ese repunte, la prima de riesgo se situaba en 632 puntos básicos (centésimas porcentuales), 21 más que el viernes; aunque ha llegado a dispararse hasta los 642. A ello también ha contribuido que los bonos alemanes -convertidos en refugio de los inversores, que los consideran más seguros- cotizaran a un nuevo mínimo (1,13% momentáneamente; aunque luego han recuperado el 1,17% del viernes).
Con esa volatilidad, a media sesión la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) ha decidido "prohibir de forma cautelar con efectos inmediatos" operaciones cortas o bajistas en mercados secundarios españoles. El veto se extenderá desde este lunes hasta el próximo 23 de octubre.
También Italia se veía sacudida en los mercados de deuda: su prima de riesgo país ha llegado a tocar los 528 puntos, aunque luego se quedaba en 516, 16 más que el viernes.
El BCE, el único que puede tranquilizar a los mercados
Ante esta subida, son cada vez más las voces españolas y europeas que reclaman al Banco Central Europeo (BCE) una intervención decidida en los mercados, una compra masiva de bonos españoles que mande un mensaje de tranquilidad y de determinación para demostrar la unidad de la eurozona.
Ante ese clamor, el presidente del BCE, el italiano Mario Draghi, ha advertido el pasado fin de semana que la función de este organismo "no es resolver los problemas financieros de los países".
Y este lunes, la institución ha confirmado que por 19ª semana consecutiva, la última tampoco compró deuda soberana. Los expertos apuntan a la intervención del BCE como la única posibilidad para tranquilizar a los mercados, una vez que la ayuda concedida a España por la Unión Europea para recapitalizar su banca se ha mostrado insuficiente para mitigar la desconfianza.
Además de España, los expertos apuntan a otras razones que ayudan a la desconfianza, como la información recogida en un periódico alemán sobre la pérdida de paciencia del FMI hacia Grecia, la decisión del BCE de dejar de utilizar la deuda pública griega como colateral en las operaciones de inyección de liquidez a partir del próximo miércoles o la afirmación del ministro de Economía alemán de que la salida de Grecia del euro no es improbable.
Preocupante lastre para la subasta del Tesoro
Estos niveles son muy preocupantes, sobre todo, de cara a la subasta que el Tesoro -de letras a 3 y 6 meses, este martes- tiene previsto celebrar esta semana.
Los elevados tipos de interés del mercado secundario -reflejo de la poca confianza que los inversores tienen en España- pueden así repercutir en las rentabilidades que el Tesoro se vea obligado a ofrecer para poder colocar su emisión y captar los fondos que necesita para ir cubriendo los vencimientos de la deuda pública.
Los analistas explican que la presión sobre España responde a las dudas de los inversores sobre la capacidad del país de hacer frente a sus compromisos de pago, ya que -como confirmó el viernes el Gobierno- la economía española seguirá en recesión hasta el año que viene y las deudas de las comunidades autónomas empiezan a convertirse en inasumibles para ellas, lo que lleva al Estado central a socorrerlas.
Eso ha llevado a que la Comunidad Valenciana haya decidido ya acogerse al fondo de rescate autonómico creado por el Estado y a que otras autonomías estén estudiando la posibilidad de seguir sus pasos. Por el momento, Murcia ha desmentido que vaya a hacerlo por ahora, aunque reconoce que lo estudia.
El Ibex vuelve a caer
La Bolsa de Madrid ha recogido este ánimo pesimista y ha ha llegado a desplomarse más de un 5% y a perder los 6.000 puntos por la mañana. Al final ha perdido solo un 1,10 % hasta los 6.177,4 puntos. Las mayores caídas las han registrado las constructoras.
El resto de grandes bolsas europeas vivían una jornada de mayores caídas, entre el 2,1% de Londres y el 3,2% de Fráncfort.
El euro cotizaba también a la baja en el mercado de divisas de Fráncfort y se cambiaba a 1,21 dólares, el mínimo desde hace dos años.