Alepo, la batalla que puede cambiar el curso de la guerra de Siria
- Los rebeldes y las tropas de Asad han reforzado sus líneas para la batalla
- La posición estratégica y su poder económico la convierten en pieza clave
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Es la guerra total y la de Alepo puede ser una batalla decisiva que incline la balanza. Bachar al Asad lo sabe y las fuerzas rebeldes también. El valor estratégico de la ciudad, tanto por su peso económico, como por su situación geográfica la convierte en un objetivo irrenunciable para ambos bandos, que han reforzado sus efectivos antes de enfrentarse. Y por eso, también, EE.UU. y otros países temen que el resultado sea una gran masacre.
“Para el régimen, la ciudad representa un centro importante porque es la principal ciudad comercial donde cuenta con muchos aliados, en particular en la clase comerciante”, comenta el diplomático Ignace Leverrier en un artículo publicado por The Independent. A los rebeldes, por su parte, el control de Alepo les daría la oportunidad de crear una zona segura y la llave para controlar el norte de Siria, así como la frontera con Turquía.
"Las fuerzas especiales fueron desplegadas estos miércoles y jueves en el flanco oriental de la ciudad y otras tropas llegaron a participar en una ofensiva general " manifestó AFP una fuente de seguridad del régimen.
Los rebeldes, conscientes de la importancia estratégica de este batalla, también se han reforzado. Entre 1500 y 2000 milicianos han llegado desde el exterior para prestar apoyo a los 2.000 combatientes que están en la ciudad. "Han llegado refuerzos militares a Alepo y esperamos que en cualquier momento comience una gran ofensiva", comenta el portavoz del Ejército sirio libre en Alepo, el coronel Abdel Jabbar al-Okaïdi, a través de Skype.
“Si Alepo cae, el régimen está acabado, y los dos adversarios lo saben”, aseguró un representante del opositor Observatorio Sirio para los Derechos Humanos.
La segunda ciudad del país
Los combates en la segunda ciudad en importancia de Siria se han recrudecido desde el pasado miércoles. Los rebeldes aseguran que tienen el control del 60% de los barrios, incluyendo algunos del centro. Por su parte, las fuerzas del régimen han impuesto un estrecho cerco a la ciudad, y durante este viernes han bombardeado con artillería y helicópteros.
Desde el aire, los ataques se han concentrado en los barrios de Azamiyé, Salahadin, Bustan al Kasr, Sukari y Mashad, según fuentes opositoras. En tierra se han registrado combates en las proximidades de Saadala al Jabiri, Mahatat y Jamiliye.
Alepo, con 2,5 millones de habitantes, ha sido un enclave estratégico que se ha mantenido relativamente al margen de los combates en los más de 16 meses de revueltas. Durante décadas, la ciudad ha simbolizado la alianza entre el régimen alauí y la burguesía suní. Eso hace que algunos analistas se pregunten con cuánto apoyo cuenta aún Bachar al Asad en la ciudad.
Para Ignace Leverrier, el régimen aún podría tener el respaldo “sobre todo de ciertas tribus que fueron recompensadas por haber ayudado en la lucha contra los Hermanos Musulmanes en la década de los 80”.
El ejemplo de Bengasi
Pero, además, el 20% de la ciudad es kurda, y la posición que adopte esta comunidad puede ser determinante. “Ha habido profunda divisiones entre los kurdos”, comenta Leverrier. “Si se posicionan con los rebeldes, el régimen tendrá serias dificultades. Si lo hacen con el régimen, es difícil que los rebeldes ganen la batalla”.
Para algunos expertos, los rebeldes tratan de conseguir que Alepo se convierta en lo que Bengasi fue para Gadafi. “Si Alepo se convierte en una ciudad libre como Bengasi, estaremos avanzando hacia un estado final”, comenta el director del Doha Brookings Center, Salman Shaikh, citado en el artículo de The Independent.
La caída de la ciudad también podría modificar la estructura de la guerra. “Si tienes Alepo, al menos virtualmente también tienes (bajo control) Idlib, que ha sido reclamada por los rebeldes”, comenta Riad Kahwaji, director del Instituto para el Oriente Próximo y de Análisis Militar del Golfo.
"Esa zona sería una zona de seguridad para los rebeldes, para su organización, entrenamientos y la obtención de armas", añade, según AFP. Por el momento, casi el 70 % de las ciudades grandes del campo en el noroeste de Siria, cerca de la frontera de Turquía - ciudades como Maarat al-Nuaman, Sarmada, Nisreen Maarat, Takharim Kafar, Teftanaz y Binish - están en manos de los rebeldes, según han informado a Reuters miembros del ELS.
Escalada de la violencia
Sea como fuere, los combates que ya se han desarrollado en Alepo ya ha modificado algunas conductas de la guerra civil de Siria. Por primera vez, informó la BBC, en los ataques del régimen intervinieron cazas, es decir, la aviación siria, lo que implica un salto cualitativo en el desarrollo de la guerra.
La portavoz del Departamento de Estado estadounidense, Victoria Nuland, expresó este jueves la preocupación de su gobierno por esta situación.
”La preocupación es que veremos una masacre en Alepo, y eso es hacia lo que el régimen parece encaminarse", sentenció Nuland, que calificó la ofensiva de intento "desesperado" de un régimen que está perdiendo el control de su territorio. Las espadas están en alto.