EE.UU. culpa a China y Rusia de la renuncia de Koffi Annan como mediador de la ONU para Siria

• Bloquearon hasta tres veces una condena a Siria en el Consejo de seguridad
• Por su parte, Siria y Rusia dicen haber apoyado los esfuerzos de Kofi Annan
• Pese a estas declaraciones, EE.UU. denuncia la doble moral siria

El Gobierno de Estados Unidos ha responsabilizado a China y Rusia de la renuncia de Kofi Annan como mediador para Siria por el bloqueo de ambos países hasta en tres ocasiones para aprobar una resolución de condena al régimen de Bachar Al Asad en el Consejo de Seguridad de la ONU.

"Ha trabajado sin descanso para tratar de construir un consenso en la comunidad internacional, acabar con las matanzas y dar paso a un Gobierno que responda a las aspiraciones legítimas del pueblo sirio. Por desgracia, se ha impedido que el Consejo de Seguridad le diera las herramientas clave para impulsar sus esfuerzos", ha afirmado la secretaria de Estado de EE.UU., Hillary Clinton.

Por otro lado, el senador y excandidato presidencial republicano John McCain ha afirmado que la misión mediadora del exsecretario general de la ONU Kofi Annan en Siria estaba "condenada al fracaso desde el comienzo" porque "estaba basada en las premisas de que Bachar al Asad detendría las masacres de su pueblo y que los observadores de Naciones Unidas podrían llegar y colocarse entre dos fuerzas combatientes ignorando totalmente los fundamentos de este conflicto".

McCain atacó duramente la postura "vergonzosa" del presidente estadounidense, Barack Obama, por no intervenir en Siria, ya que "cuanto más tiempo se prolongue el conflicto corre más peligro de que extremistas y yihadistas vayan a combatir" y que las armas químicas del régimen caigan en manos de Hezbolá u otros grupos terroristas.

Siria y sus aliados, "comprometidos" con la paz

Por su parte, el enviado ruso en la ONU, Vitali Churkin "ha lamentado" la decisión adoptada por el enviado de la ONU. "Entendemos que es una decisión histórica y lamentamos que haya decidido hacerlo. Hemos apoyado firmemente los esfuerzos de Kofi Annan", ha explicado Churkin, informa Reuters.

China también ha sentido la renuncia de Kofi Annan y ha destacado la importancia del papel de las Naciones Unidas en la solución de la crisis siria.

"Somos conscientes de las dificultades de la labor de mediación de Annan, y respetamos su decisión", ha asegurado en un comunicado recogido por Reuters el portavoz del Ministerio chino de Relaciones Exteriores, Hong Lei, que ha destacado la apertura de China a “propuestas que ayuden a promover una solución política a la cuestión de Siria".

Por otro lado, el régimen sirio insiste en que  "siempre ha declarado y ha demostrado su compromiso con el plan (de paz) de Annan", pero que "los países que pretenden desestabilizar Siria han sido quienes bloquearon su misión y continúan haciéndolo", informa Efe.

"Siria expresa su pesar por la renuncia de Kofi Annan", ha señalado el Ministerio sirio de Asuntos Exteriores en un comunicado, que ha manifestado que está "comprometida con la lucha contra el terror y con la paz y la estabilidad" y que "todavía cree que la salida a esta crisis es el diálogo nacional y la reconciliación sin ninguna intervención internacional".

Doble moral de Siria

No obstante, el portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney asegura que pese a su "promesa" de cumplir con el plan de paz diseñado por Annan, el presidente Asad "continúa asesinando brutalmente a su propio pueblo", ha asegurado Carney.

En el mismo sentido, se ha pronunciado el Gobierno de Canadá, que da por muerto el plan de paz de seis puntos tras la renuncia de Koffi Annan. Un hecho que no le sorprende dadas las circunstancias.

"Canadá no está excesivamente sorprendida de la decisión, dado el descarado desprecio de Asad a los compromisos del paz de plan de Anan", ha asegurado el ministro de Asuntos Exteriores de Canadá, John Baird, a través de un comunicado. Canadá ve como única solución que el "Consejo de Seguridad de la ONU imponga sanciones económicas y un embargo de armas a Siria de acuerdo al Capítulo 7".

"Esto sólo será posible si aquellos que resguardan al régimen de las sanciones internacionales se unen al resto de la comunidad internacional para aumentar la presión sobre Siria para terminar la violencia", añadió Baird.