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Rusia cree que la resolución de la ONU respalda "descaradamente" a la oposición siria

  • Rusia acusa a sus patrocinadores de proveer armas a la oposición
  • Y Siria acusa a Occidente de incentivar el derramamiento de sangre

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Duras críticas al Consejo de Seguridad sobre Siria

Rusia, que junto a otros once países ha rechazado la resolución de condena al régimen sirio aprobada por la Asamblea General de la ONU, rechaza esta votación al considerar que respalda "descaradamente" a la oposición armada que lucha contra el Gobierno del presidente Bachar al Asad.

"Tras la fachada de retórica humanitaria, la resolución esconde un apoyo descarado a la oposición armada", ha explicado el embajador ruso ante la ONU, Vitaly Churkin, que acusa a los patrocinadores de esta resolución de proveer “armas y mercenarios” a la oposición.

Churkin ha criticado también la condena del texto a la inacción del Consejo de Seguridad, dónde Moscú y Pekín han vetado hasta tres veces una resolución de condena al régimen sirio.

Junto a Rusia, China, Irán, Corea del Norte, Cuba, Venezuela, Nicaragua y Bolivia, entre otras, han votado en contra de esta resolución por considerarlo “poco objetivo” al señalar a Al Asad como primer responsable de la violencia en su país.

En el mismo sentido que Rusia, China ha argumentado su voto negativo en que "una posición de presión solo sobre una parte" no logrará resolver la crisis siria, sino que hará "descarrilar una solución política y provocará una mayor escalada" de la violencia.

"Postura hipócrita de Occidente"

Por su parte, el viceprimer ministro de Siria, Kadri Dzhamil, ha acusado a las potencias occidentales de respaldar a los terroristas en el país árabe al apoyar a los extremistas que combaten al régimen de Bachar al Asad.

"Occidente toma una postura hipócrita”, “sabe que existen extremistas que tienen las manos cubiertas de sangre”, “Occidente no quiere la paz, sino más derramamiento de sangre", ha dicho Dzhamil en rueda de prensa, citado por las agencias rusas. El responsable, antiguo líder del opositor Frente Popular por el Cambio y la Liberación de Siria, ha acusado a las potencias occidentales de respaldar a los terroristas.

Por su parte, la embajadora de Estados Unidos ante Naciones Unidas, Susan Rice, ha informado en un comunicado que "pese a la continua oposición de una minoría cada vez más aislada, la inmensa mayoría de los miembros de la ONU está decididamente con el pueblo sirio en su búsqueda por que se respeten sus legítimas aspiraciones".

Según Rice, su país seguirá trabajando con sus socios "en Naciones Unidas y en todas partes" para que "la transición avance en Siria, proveer ayuda humanitaria a quienes la necesiten y para unir y reforzar a la oposición política" a Al Asad.