Varios heridos en enfrentamientos entre jóvenes y Policía en la ciudad francesa de Amiens
- Los jóvenes incendiarion edificios públicos, coches y mobiliario urbano
- Hollande advierte que el estado usará "todos sus recursos" contra la violencia
- Se trata de una "zona de seguridad prioritaria" para el Ministerio de Interior
Varias personas resultaron heridas durante la noche del lunes en Amiens (norte de Francia) a causa de unos altercados entre las fuerzas del orden y grupos de jóvenes que incendiaron edificios públicos y vehículos y agredieron a automovilistas.
La prefectura (delegación del Gobierno) indicó que una escuela, un polideportivo y un centro de ocio en el norte de Amiens fueron pasto de las llamas, igual que una veintena de coches y abundante mobiliario urbano, en particular varias decenas de papeleras.
La Policía empleo a agentes de toda la región e incluso de París que se enfrentaron a los alborotadores y desde un helicóptero controlaba las operaciones. Durante tres horas, los jóvenes formaron barricadas con papeleras y contenedores y lanzaban todo tipo de proyectiles contra los antidisturbios, que les respondían con bombas lacrimógenas, explicó una residente del barrio a la emisora de radio Europe 1. Además de algunos policías heridos, varios automovilistas fueron asaltados y agredidos.
El presidente francés, François Hollande, ha advertido que su gobierno hará todo lo posible para asegurar la ley y el orden en la ciudad. "El ministro del Interior Manuel Valls irá a Amiens inmediatamente, para decir una vez más que el estado movilizará todos sus recursos para combatir esta violencia".
"Nuestra prioridad es la seguridad, lo que significa que el próximo presupuesto incluirá fuentes adicionales para la gendarmería y la Policía", ha dicho Hollande.
Zona de seguridad prioritaria
El domingo por la noche ya hubo un choque entre jóvenes y fuerzas del orden en ese mismo barrio al norte de la ciudad después de un control de carretera.
Se trata de una de las quince "zonas de seguridad prioritaria" escogidas por el ministro del Interior, Manuel Valls, para aplicar medidas particulares contra la delincuencia, como mayores despliegues de policías.
Según recogía el diario regional Le Courrier Picard en su edición digital del 6 de agosto, muchos vecinos opinaban, antes del agravamiento de la violencia, que dicha medida tomada por Interior podría ser contraproducente, y que lo recomendable era el "diálogo" con los jóvenes y la adopción de medidas sociales.