Wert no descarta cambiar la ley para que los colegios por sexos puedan ser concertados
- El ministro insiste en que no tiene por qué haber discriminación
- Educación prepara un proyecto de leyde mejora de la calidad educativa
El ministro de Educación, José Ignacio Wert, ha apuntado este jueves la posibilidad de que la ley explicite, en la futura reforma educativa, que la enseñanzas diferenciada por sexos no tiene por qué suponer discriminación ni segregación en "determinadas condiciones", por lo que podrían ser concertados y ser sostenidos con fondos públicos.
Ello, según Wert, sin cambiar el artículo 84.3 de la Ley Orgánica de Educación, según el cual en ningún caso habrá discriminación, en la admisión de alumnos en los centros, por razón de nacimiento, raza, sexo, religión, opinión o cualquier otra condición o circunstancia personal o social.
En declaraciones a la Cadena Ser recogidas por Efe, el ministro se ha referido a las sentencias del Tribunal Supremo que consideran ajustado a derecho que las administraciones autonómicas denegaran el concierto a dos colegios cántabros y otro andaluz al amparo de ese ese artículo.
"Quizás una clarificación del marco legislativo en el que se resuelve esta cuestión ayude o dé lugar a resoluciones en otro sentido", ha comentado en alusión al proyecto de ley de mejora de la calidad educativa que el Gobierno enviará al Congreso entre finales de octubre y primeros de noviembre.
Según el ministro, si en un debate articulado y argumental, libre de prejuicios ideológicos, se determina que la posibilidad de ofrecer educación diferenciada no implica discriminación, "no habría ninguna razón" para que esos centros no sean sostenidos con fondos públicos.
Se ha incluido entres quienes creen que esa modalidad diferenciada es "compatible" con la no discriminación, y "no se excluye -ha indicado- un cambio legislativo que permita evitar las dudas que puedan existir a ese respecto". "Lo que hay que ver -ha insistido- es si es compatible con los valores constitucionales y no supone una segregación o una discriminación".
Libertad de elección de los padres
El ministro ha defendido que se examine este asunto desde el punto de vista de la "libertad de elección de los padres", como defiende la presidenta autonómica de Madrid, Esparanza Aguirre, y la compatibilidad de ese modelo educativo con los valores constitucionales.
Ha dicho que el tema de educación diferenciada es "esencialmente pedagógico" y que es una discusión "legítima" pensar que es bueno o malo y argumentar si ofrecer este tipo de enseñanza "contraviene valores de igualdad".
Ha reiterado que respeta y acata las sentencias, y otra cosa es que se pueda discutir la fundamentación jurídica.
La cuestión, ha señalado, no es si hay mucha o poca demanda de este modelo educativo, sino si es legítimo dentro del ámbito de elección de los padres, si ese modelo diferenciado es o no compatible con las propias exigencias de la ley. "Se pude estudiar si es posible de alguna forma establecer la compatibilidad de ese modelo de educación con todas las medidas de evitación de discriminación", ha subrayado.