Un avión espía de EE.UU. mata a 16 insurgentes en el oeste de Pakistán
- Cinco ataques en una semana con drones o aviones no tripulados
- La zona es un refugio de miembros yihadistas, de Al Qaeda y talibanes
Varios misiles lanzados desde aviones no tripulados de EE.UU. han matado este viernes a 16 insurgentes en el área tribal de Waziristán del Norte, en el oeste de Pakistán, según han informado medios locales.
Se han producido tres ataques en el distrito de Shawal, de acuerdo con la cadena Geo y el diario Express Tribune. Los ataques han dejado además entre 13 y 14 heridos.
Un funcionario del organismo gubernamental de coordinación para las áreas tribales ha afirmado a EFE del ataque que ha tenido como escenario la aldea de Tundar. Poco después, la misma fuente ha cifrado en cuatro los insurgentes muertos en el bombardeo.
En la última semana ha habido al menos cinco ataques con aviones espía en Waziristán del Norte, lo cual ha motivado que arrecien en Pakistán las críticas por el programa estadounidense de "drones" ("zánganos"), nombre con el que se conocen estos aparatos.
El jueves el Ministerio de Exteriores paquistaní presentó una queja formal a un "representante diplomático" estadounidense y "le transmitió enfáticamente que esos ataques son inaceptables", ha informado en un comunicado ese departamento gubernamental.
En el texto no se precisa la identidad del "representante diplomático" estadounidense.
Waziristán del Norte es una de las siete demarcaciones que conforman el cinturón tribal paquistaní fronterizo con Afganistán y este año ya se han registrado allí cerca de 30 bombardeos con una cifra de muertos que supera muy ampliamente el centenar.
Esta región tribal nunca ha estado bajo completo dominio del Estado y sirve de refugio a numerosas grupos yihadistas, miembros de la red Al Qaeda o facciones talibanes, en especial la conocida como red Haqqani.
El presidente estadounidense, Barack Obama, aumentó notablemente la frecuencia de estas operaciones tras asumir el poder en 2009, como parte de su estrategia para encontrar una salida a la guerra afgana, en la que Pakistán es un elemento clave.