Bretón no confiesa nada en el nuevo registro de la finca de las Quemadillas tras los nuevos informes
- El único imputado por la desaparición de Ruth y José, ha vuelto a la finca
- Dos informes de expertos forenses señalan que los restos son de menores
- Algunos de los dientes han sido enviados a un laboratorio de Santiago de Compostela
Las pruebas en torno a la hoguera de la finca de las Quemadillas, en Córdoba, en presencia del único imputado por la desaparición de los niños Ruth y José, su padre, José Bretón, han finalizado pasadas las 11:00 horas de este martes, sin que Bretón haya "confesado absolutamente nada" y "no admite su culpabilidad" en los hechos que se investigan, según ha explicado su abogado,José María Sánchez de Puerta, informa la periodista Mavi Doñate en TVE.
El juez había citado en la finca al único imputado en el caso, padre de los dos menores desaparecidos, para la reconstrucción de los hechos, con nuevas pruebas en torno a la hoguera donde se han hallado restos que según dos informes de expertos forenses podrían ser de los menores y no de procedencia animal como determinaba un primer informe de la policía científica.
La policía, en esta actuación que ha durado apenas tres horas, ha recogido pruebas como la mesa de hierro con la que según los dos nuevos estudios, el imputado podría haber hecho un horno crematorio donde la temperatura podría haber alcanzado 800 grados centígrados dejando así destruido todo el material orgánico. Los agentes también han tomado otros objetos próximos a la hoguera, como utensilios, palos, bidones, palas y arena de alrededor de la hoguera.
Jose Bretón ha abandonado la finca en un furgón policial, de la misma forma que había llegado a las 8:45 horas de este martes, procedente de la cárcel de Córdoba, según informa Mavi Doñate. Su abogado, al término de las pruebas, ha avanzado que podría haber un juicio "en seis u ocho meses". Sánchez de Puerta ha explicado que Bretón "no admite su culpabilidad en estos hechos" y considera una "aberración que se diga que sus hijos han sido quemados ahí".
En caso de que las pruebas de ADN sobre algunos de los restos óseos que han sido enviados a un laboratorio de Santiago de Compostela confirmaran que son menores, el caso podría dar un giro y Bretón podría ser acusado de dos delitos de asesinato.
Análisis del ADN
Ante los últimos acontecimientos, el juez del caso, José Luis Rodríguez Lainz, ha decretado secreto de sumario y ha solicitado dos nuevas pruebas de carácter morfológico para comprobar "si efectivamente son restos humanos" los que contenía la hoguera de la finca, al tiempo que ha vuelto a decretar el secreto de sumario en la investigación.
De momento, algunos de los dientes encontrados en la hoguera, informa Giulia Re, de TVE ya han sido enviado a un laboratorio de Santiago de Compostela, en el podrían realizarse las pruebas de ADN, a pesar de la elevada temperatura de 800 grados centígrados a la que fueron sometidos.
Asimismo, según informa el Ministerio de Justicia este martes en un comunicado, el Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses (INTCF) recibió el lunes en su sede de Madrid un oficio del Juzgado de Instrucción número 4 de Córdoba en el que se le solicitaba proceder al análisis de unas muestras relacionadas con la desaparición de los hermanos Ruth y José y con los restos encontrados en la finca Las Quemadillas.
Un equipo mixto integrado por profesionales pertenecientes al centro así como por otros expertos ajenos a él, ya han iniciado los estudios y análisis solicitados por el juez. Los resultados de estos trabajos serán remitidos al juzgado de Córdoba "en el menor tiempo posible atendiendo a la complejidad de las pruebas que se han de realizar", concluye el comunicado.
En las pruebas de este martes se trataba de averiguar "si una de las mesas metálicas que estaba al lado de la hoguera ha tenido contacto alguno con el fuego", para determinar si ha podido servir como "horno crematorio" donde el presunto asesino habría destruido las pruebas, tal y como señalan los dos nuevos estudios hechos públicos este lunes por el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz.
Además, entre las pruebas recogidas este martes en Las Quemadillas, se encuentra "un bidón que había allí de gasolina vacío", para analizar "si hay huellas de Bretón o no y que se examine nuevamente", según ha explicado el abogado de Bretón. Y una tercera prueba es que "se recojan palos, adobes o materiales de construcción que hayan podido estar en contacto con el fuego para hacer como una especie de horno, dónde la cremación fuera bastante más rápida".
Sin embargo, el propio Bretón, después de conocerse los resultados de los dos nuevos informes forenses ha asegurado que es "totalmente imposible" que los restos encontrados sean los de sus hijos.
Nuevos informes sobre los restos
Al respecto, un primer informe policial, de noviembre de 2011, determinó que eran restos de pequeños animales, si bien la familia materna contrató a un investigador para una nueva prueba, el doctor Francisco Etxeberría, quien ha determinado que los restos de la hoguera encontrada en la finca de Las Quemadillas eran humanos, aunque sin concretar la edad de los mismos.
Todo ello a pesar de la dificultad que entrañaban estos análisis ya que la temperatura de la hoguera, dispuesta de tal forma que la convertían en un auténtico horno, habría podido alcanzar temperaturas en torno a los 800 grados que destruyeron la práctica totalidad del material orgánico, Bermúdez de Castro, codirector del yacimiento de Atapuerca.
En este sentido, el informe pericial apunta a que el progenitor habría construido un horno crematorio valiéndose de una chapa y de ladrillos para conseguir una temperatura de más de 800 grados centígrados con el fin de pulverizar los cuerpos de los dos pequeños y borrar huellas.
El hallazgo de los restos humanos se confirmó hace unos diez días, pero no fue hasta este domingo cuando a última hora de la tarde trascendió la información. Una dificultad añadida es que los restos encontrados no se pueden someter a las pruebas de ADN, pero sí se ha constatado que las muestras pertenecen a dos niños.
Después de conocerse la contradicción entre los resultados de uno y otro informe, la policía solicitó un nuevo estudio forense a otro experto, el codirector del yacimiento de la Sierra de Atapuerca, en Burgos, Bermúdez de Castro, "uno de los mejores expertos en antropología dental", según señaló el ministro del Interior. La conclusión de este nuevo informe era coincidente con el de Etxeberría, en que se trataba de un ser humano de corta edad, y concretaba: "De 6,22 años con un margen de error de más menos 43 días".