La policía de Bolivia decomisa dos toneladas de minerales con supuesto uranio
- La alarma inicial llevó al Gobierno a anunciar que era completamente uranio
- Posteriormente, se matizó que podría existir uranio en el material sólido
- Se ha detenido a cuatro personas, todas ellas bolivianos
Un grupo de elite de la policía boliviana ha decomisado dos toneladas de minerales con supuesto uranio, valorado en 50 millones de dólares, y detenido a cuatro personas, todos ellos bolivianos, cuando trasladaban este material sin ninguna medida de seguridad de un vehículo a otro en costales de yute y nailon.
El material estaba almacenado en un garaje del edificio Illimani en el centro de La Paz, situado cerca de las embajadas de Estados Unidos y España, según ha informado el viceministro de Régimen Interior, Jorge Pérez.
En un principio, las autoridades informaron de que se trataba completamente de uranio, un material altamente radioactivo, y establecieron un perímetro de seguridad de 50 metros a las puertas del garaje dónde tenía lugar el operativo policial. La gente de las oficinas en las que se guardaba el supuesto material radioactivo se quedó atónita. La preocupación fue tal que el material decomisado fue cargado y manipulado por las mismas personas detenidas.
La alarma cundió debido a la sorpresa del hallazgo, puesto que en Bolivia teóricamente no se explota uranio. Por su parte, el geofísico privado Jorge Tellería se personó en el lugar y expresó sus dudas porque consideró poco probable que un comerciante o minero pueda almacenar uranio en costales y trasladarlo en camionetas por el peligro que corre.
Matización del Gobierno
Posteriormente el ministro enfatizaba que la carga no causa una "onda expansiva de material radiactivo que ponga en peligro la salud de la población" y que harán nuevos exámenes de laboratorio para determinar el volumen de uranio en la carga. Todo ello, tras las peticiones de expertos geofísicos de que no se cause alarma si no se tiene plenamente comprobado el contenido.
"Presumimos inicialmente, preliminarmente, que existe uranio en esos materiales sólidos", ha comentado el ministro de Gobierno, Carlos Romero, en rueda de prensa.
Romero también afirmó que en casi todos los países del mundo se prohíbe el comercio de las sustancias radiactivas porque sirven para armas nucleares.
"En todas las legislaciones del planeta generalmente el manejo del uranio es de monopolio exclusivo estatal, no es de uso ni de manipulación de particulares. En Bolivia existe una prohibición de manejar materiales que comprometan la salud pública", comentó, por su parte, el viceministro de Régimen Interior, Jorge Pérez.
Mes y medio de investigaciones
El comandante del operativo, el coronel Eddy Torrez, ha precisado que los policías tenían conocimientos de que este martes podría realizarse una transacción de venta de uranio en el marco de una investigación abierta desde hace mes y medio. Uno de los detenidos es un ingeniero, que ha declarado ser solo el depositario del uranio sin dar más detalles sobre el propietario de la carga.
La hipótesis inicial de las autoridades contempla que se trata de una carga en tránsito, posiblemente hacia Europa, desde Brasil o Chile donde sí se produce ese material.
Otro de los detenidos dijo que se trataba de tantalio, pero el ministro de Gobierno ha señalado que presumen que esa versión es para "camuflar" la manipulación de la carga radiactiva, sin cumplir con las normas de seguridad o los protocolos que fija la legislación para estos casos.
Según la Corporación Minera de Bolivia (Comibol) es la primera vez que en el país se encuentra un depósito con supuesto material radiactivo en ese volumen. En declaraciones a radio Erbol, su presidente, Héctor Córdoba, ha opinado que el hallazgo es "preocupante" y "sorprendente" porque "el país no está explotando formalmente este mineral".
Recordó que hace 40 años hubo un intento del país de explotar uranio en la zona andina de Potosí, pero que después fue cancelado por la situación del mercado en ese momento.