El verano acaba con 262 muertos en accidentes de tráfico, el dato más bajo de la historia

• Son 62 víctimas menos que durante el verano de 2011
• El 23% de los fallecidos nos llevaban puesto el cinto

El balance de tráfico concluye con 62 muertos menos que el 2011

El verano con menos víctimas en las carreteras. Hasta 262 personas han fallecido en accidentes de tráfico durante julio y agosto de 2012. Son 62 víctimas mortales menos (un 19%) que en 2011, lo que convierte a este verano en el menos siniestro de la historia.

Así lo ha asegurado la directora de Tráfico, María Seguí, en una rueda de prensa en la sede del Centro de Gestión de la DGT en la que ha dado cuenta del balance de siniestralidad en las carreteras este verano.

"Es un día especialmente grato porque es positivo, optimista y nos da muchas esperanzas para lo que queda del año", ha destacado Seguí sobre el descenso tan relevante del número de muertos en accidentes de tráfico este verano.

Entre los "peros" de estos buenos resultados, la directora de Tráfico ha  lamentado que 35 personas, el 23% de los 152 fallecidos en  turismo, no llevara puesto el cinturón de seguridad y que, de los seis  niños menores de 12 años fallecidos este verano, la mitad no viajara con  el sistema de retención infantil.

Por el contrario, ha resaltado las cifras del mes de julio, con 111 accidentes en los que perdieron la vida 117 personas, lo que supone 55 menos que en julio de 2011 y un descenso del 32%.

El mes de agosto, en el que ha habido un ligero aumento de los desplazamientos, ha finalizado con 127 accidentes mortales en los que fallecieron 145 personas, siete menos que en el mismo mes del pasado año en el que hubo 152 víctimas.

Dado que el dispositivo especial de Tráfico concluyó este fin de semana, 1 y 2 de septiembre, con ocho fallecidos, Seguí ha indicado que el balance total con datos provisionales a veinticuatro horas tras el siniestro sería de 270 muertos este verano.

272 muertos en 1960

Una cifra que no supera el primer dato estadístico de 1960 del que consta la DGT, año en el que perdieron la vida 272 personas, teniendo en cuenta que tanto el parque automovilístico como el número de desplazamientos eran menores.

Seguí ha destacado que el descenso del 19% de las víctimas mortales con respecto al verano pasado se ha producido no solo el número de muertes, sino también el de accidentes -238 frente a 287- y en todos los usuarios, tras lo cual ha destacado que los fallecidos en motocicleta, que han sido 39 y todos llevaban casco, supone un 34% menos que en 2011.

Por sexos, la mayoría de las víctimas mortales -192- eran hombres frente a 68 mujeres, siendo los menores de 54 años los que más han descendido en fallecidos con respecto al verano pasado.

Así, han muerto 63 personas de entre 25 a 34 años, un 17% menos que en julio y agosto de 2011; 61 víctimas de entre 35 y 44 años, un 8% menos, y 30 fallecidos de entre 45 a 54 años, lo que supone un descenso del 50% con respecto al periodo estival del pasado año.

También han descendido los fallecidos de todos los tipos de vehículos excepto los de ciclomotor cuya cifra de muertos, 8, mantiene la del anterior frente al colectivo de los peatones -15 muertos- que acumula la mayor caída de siniestralidad, un 48% respecto a 2011.

Respecto al tipo de vía,  bajan las víctimas mortales con respecto al pasado verano tanto en autopistas (8 fallecidos frente a 16) como en autovía (46 frente a 61) y carreteras convencionales (208 frente a 247).

Por todo ello, Seguí ha reconocido el trabajo de todo el dispositivo de vigilancia en las carreteras en esta Operación Verano y ha agradecido a la población su buen comportamiento y por ser "los auténticos protagonistas de estos resultados".

"Vamos a seguir trabajando para que estas tendencias no solo se ratifiquen sino para que podamos hablar algún día de un problema del pasado", ha añadido Seguí.

Por otra parte, la directora de Tráfico ha dado a conocer los resultados de los 425 controles de drogas practicados este verano a aquellos conductores que, aunque dieron negativo en la prueba de alcoholemia, presentaban alguna sintomatología evidente para los agentes de Tráfico de que podían haber ingerido alguna sustancia estupefaciente.

Así, han dado positivo en drogas un 62% de estos conductores, fundamentalmente cocaína y cannabis, seguidos de los opioides, metanfetaminas y anfetaminas.