Asesinada en Medellín la "reina de la cocaína" colombiana de los años setenta

• Precedió en el envío de drogas a los grandes jefes de los carteles de Medellín
• Ha sido acribillada a balazos por un sicario que se dio a la fuga

La llamada "reina de la cocaína" de Colombia en la década de los años setenta, Griselda Blanco, que cumplió una sentencia de dos décadas de cárcel en Estados Unidos, fue asesinada hoy en Medellín, informaron las autoridades.

Blanco, de 69 años, recibió varios balazos en la cabeza disparados por un sicario que huyó en motocicleta, cuando salía de una carnicería del barrio Belén en el sector oeste de Medellín.

Fuentes de la policía de esa ciudad indicaron que la "reina de la cocaína" estaba acompañada de una de sus nueras, embarazada, que resultó ilesa.

Algunas autoridades recordaron que Blanco precedió en el envío de drogas a los grandes jefes de los carteles de Medellín y de Cali en aquellas décadas como Pablo Escobar, Carlos Ledher o los hermanos Miguel y Gilberto Rodríguez.

A Blanco se le reconoce la "idea de exportar cocaína" a Estados Unidos y también fue la persona que "dictó cátedra entre los sicarios de los años setenta" tras matar a varios rivales, e incluso a uno de sus maridos, "pistola en mano", según crónicas sobre su vida.

"La reina de la cocaína", llamada también "la Patata" o "la Madrina", fue la pionera de las rutas de ese tráfico entre Colombia y Estados Unidos.

En 1985 fue condenada en Estados Unidos por "conspiración para introducir cocaína" en ese país a través del estado de Florida y fue deportada a Colombia en 2004.

Desde su regreso a Colombia, Blanco, considerada una de las mujeres más ricas del mundo, se mantuvo en la clandestinidad.