Plantas fósiles de 100 millones de años en Teruel, los antepasados de las flores actuales
- El yacimiento revela la evolución de las plantas con flores del planeta
- Estas plantas, que estaban en expansión, dominan los ecosistemas actuales
- La Península Ibérica podría haber sido puente para la dispersión de la flora
Un equipo internacional de investigadores, liderados por paleontólogos de la Universidad de Zaragoza, ha descubierto en Estercuel (Teruel) un yacimiento de plantas fósiles de 100 millones años, casi único en el mundo al poder revelar la evolución de las plantas con flores en el planeta.
El estudio describe diferentes "fósiles de helechos, coníferas y angiospermas (o plantas con flor) de especies tanto terrestres como acuáticas", asegura Luis Miguel Sender, doctorando del Área de Paleontología de la Universidad de Zaragoza.
Este hecho prueba que "la Península Ibérica habría servido como puente para la dispersión de las floras del Cretácico Inferior" afirma el paleontólogo.
“La Península Ibérica habría servido como puente para la dispersión de las floras del Cretácico Inferior“
Según el experto, esta abundante flora fósil, que pertenece a la parte más moderna del Cretácico Inferior, "contiene fósiles de diferentes tipos de helechos, coníferas y hojas y granos de polen pertenecientes a primitivas plantas con flores", tanto terrestres como acuáticas, que se desarrollaron "a la orilla de los pantanos costeros" del mar de Tethys que por entonces constituían la provincia de Teruel.
Hace 100 millones de años estas plantas con flores "se encontraban en su fase de expansión" y actualmente se han convertido en las plantas que dominan todos los ecosistemas terrestres actuales, por lo que estos registros fósiles son considerados de "extraordinaria importancia", asegura Sender.
Yacimiento único
Además de que este yacimiento es "uno de los pocos con plantas fósiles de esta edad a nivel mundial", lo que coloca a Estercuel y dentro de la cúspide del desarrollo este tipo de plantas.
La singularidad del hallazgo también reside en el hecho de que algunos tipos de estas plantas solo se han encontrado "en un único yacimiento de la misma edad en Kansas (Estados Unidos)", recalca Sender, y otros mantienen relación con la existencia de otras plantas en norte de África y este de Suramérica durante esa época, lo que indicaría una cierta relación entre estas zonas.