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El PRI propone la reducción de los escaños en el Congreso mexicano

  • Debe recibir el aval de al menos 17 de los 32 congresos estatales
  • Busca reducir la Cámara baja de 500 a 400 diputados
  • La medida también afectaría al Senado

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El Partido Revolucionario Institucional (PRI) ha presentado a la Cámara de Diputados mexicana una iniciativa para reducir en 20% el número de diputados y en 25% los escaños del Senado.

El objetivo del proyecto legislativo presentado por la diputada Patricia Elena Retamoza, que plantea reducir de 500 a 400 los miembros de la Cámara baja y de 128 a 96 los asientos del Senado, es favorecer la formación de mayorías y ahorrar costos.

En el complejo sistema mexicano, hay 300 diputados por mayoría relativa y 200 más, los llamados plurinominales, que son ocupados por representantes de cada uno de los partidos que acudan a las elecciones de acuerdo con fórmulas establecidas a partir de su votación proporcional.

En la Cámara alta se designan dos senadores entre el partido triunfador en cada estado, por mayoría de votos, y uno más para la primera minoría. Además, hay 32 escaños que se reparten de acuerdo a la participación proporcional que registraron los partidos en todo el país.

Eliminación de la representación proporcional

La iniciativa presentada hoy plantea la eliminación de la mitad de los diputados (100) y de todos los senadores (32) que actualmente son elegidos bajo el principio de representación proporcional.

Retamoza dijo que la dificultad para la construcción de mayorías se deriva de un sistema de representación política que, buscando la pluralidad a través de la fórmula de representación proporcional, "dificulta la gobernabilidad" y genera altos costes.

"Es momento de atender el reclamo de la sociedad que pide un Congreso moderno y que dé resultados sin tanto dinero; la realidad es que somos muchos y costamos caros", apuntó.

El salario de los parlamentarios mexicanos está por encima de los 12.000 dólares mensuales, sin considerar cantidades extras por bonos, seguros de vida y otras subvenciones.

La reforma constitucional permitirá crear un nuevo equilibrio funcional entre una mayoría útil y otras minorías, al impedir que éstas últimas tengan una representación desproporcionada y adquieran un poder de veto injustificado.

En caso de ser aprobada por el pleno de la Cámara de Diputados, el Senado también debe dar luz verde a la iniciativa y después tiene que recibir el aval de al menos 17 de los 32 congresos estatales para su entrada en vigor.