Miles de personas protestan en Argentina contra las políticas de Cristina Fernández
- Los manifestantes protagonizan una cacerolada en la Plaza de Mayo
- Critican la intención de la presidenta de optar a un tercer mandato
- Fernández se defiende: "Nerviosa no me voy a poner"
Miles de personas salieron este jueves a las calles de la capital de Argentina, Buenos Aires, para protestar con una cacerolada contra las políticas del gobierno de Cristina Fernández de Kirchner.
El nuevo "cacerolazo", convocado a través de las redes sociales, tuvo amplia convocatoria en distintos puntos de la capital argentina, incluyendo la Plaza de Mayo, frente a la sede del Ejecutivo, y en ciudades como Mendoza, Rosario, La plata, Córdoba, Santa Fe y Bariloche, según imágenes trasmitidas por la televisión local.
Estas protestas suceden a otras, menos masivas, que tuvieron lugar en junio, también con consignas en contra de las políticas del Gobierno, como las restricciones cambiarias, y contra una eventual reforma constitucional para habilitar a Fernández un tercer mandato presidencial.
En la Plaza de Mayo se vieron banderas argentinas y carteles con consignas como "por la defensa de la Constitución nacional", "contra la inseguridad", "contra la re-reelección", "por la defensa de las instituciones", por una "Argentina sin corrupción" y por la "libertad".
Fernández defiende su gobierno
Mientras las protestas se desarrollaban en distintos puntos del país, Fernández presidía un acto en la norteña ciudad de San Juan, donde en su discurso hizo una fuerte defensa de su Gobierno.
"Contra la cadena nacional del desánimo, el miedo y el pesimismo, estamos millones de argentinos que creemos en este proyecto nacional, popular y democrático", afirmó la mandataria.
Fernández aseguró que "hubo horribles gobiernos que hundieron a la Argentina en crisis institucionales, sociales y culturales". "Yo nerviosa no me voy a poner, que se queden tranquilos", dijo la jefa de Estado.
La mandataria no ha confirmado ni desmentido su intención de aspirar a un tercer mandato en los comicios de 2015, para lo cual se necesita una reforma constitucional, aunque algunos miembros del oficialismo han planteado la posibilidad de esa alternativa.
Fernández accedió a un segundo mandato presidencial de cuatro años en las elecciones generales de octubre de 2011, cuando obtuvo el 54 % de los votos.