El presidente de la patronal tilda de "barbaridad" que Cataluña camine hacia la independencia
- Juan Rosell afirma que se reducirían los beneficios de todos los empresarios
- También aboga por reformar el Estado de las Autonomías
El presidente de la CEOE, Juan Rosell, ha afirmado que si Cataluña consiguiera la independencia se reducirían los beneficios no sólo de los empresarios catalanes, sino "los de todos y cada uno" de los empresarios del conjunto de territorios de España, por lo que ha calificado de "barbaridad" que se quiera ir "por ese camino".
Rosell, en declaraciones a Onda Cero, ha abogado por reformar "seriamente" el Estado de las Autonomías, pero no sólo para Cataluña, sino para todas las regiones, y pensando no en los territorios, sino en las personas.
"El café para todos fue bueno en un momento dado, pero ahora no tenemos dinero para todo. Hemos de priorizar y recortar muchas cosas porque no tenemos tantos ingresos", ha subrayado el líder de la CEOE.
En este sentido, el dirigente empresarial ha apostado por un pacto fiscal, pero no únicamente para Cataluña, sino para todas las autonomías. "Tiene que haber un pacto fiscal para todas las comunidades", ha declarado.
Preguntado por cómo se articularía esto en la práctica (por ejemplo, implantando agencias tributarias propias en las comunidades), Rosell ha indicado que eso es algo que deben resolver los políticos, aunque ha precisado que hay "muchas maneras y sistemas" para conseguirlo.
La estructura territorial es demasiado pesada
"Lo que está claro es que hay que redefinir nuestra estructura territorial y local porque no aguanta, es demasiado pesada", ha dicho Rosell, que ha añadido que las finanzas de España "no podrían aguantar" que en Cataluña se estableciera una especie de cupo, al estilo del de País Vasco o del de Navarra. "Si todas las comunidades tuvieran cupo, no saldrían los números, eso no es posible", ha zanjado.
Preguntado por si los empresarios catalanes están soportando presiones en torno a este asunto, el presidente de la CEOE ha recordado que los empresarios "no son extraterrestres que viven en otro país", sino que están en relación con la sociedad, por lo que en el día a día reciben, "no presiones", sino comentarios y opiniones. "Pero en el momento en que llegamos a nuestros despachos somos empresarios y tenemos que defender nuestras empresas", ha agregado.
Rosell ha asegurado que los empresarios le están mostrando "muchísima inquietud y preocupación" por el asunto de Cataluña, pero también "muchísimo silencio", pues no es labor de los empresarios meterse en política.
"Para meternos en política ya nos tienen a los representantes de los empresarios en organizaciones como la nuestra. La CEOE está para eso, para sacarles las castañas del fuego en muchos momentos complicados como éstos", ha apuntado.