Rivero y Soler presentan uno de los mayores concursos de acreedores por 1.625 millones
- Son los segundos máximos accionistas de la inmobiliaria francesa Gecina
- Uno de los bancos acreedores ha rechazado negociar las condiciones del préstamo
Las familias Rivero y Soler han solicitado el concurso de acreedores para sus sociedades Alteco Gestión y Mag Import, a través de las que controlan más del 30% de la inmobiliaria francesa Gecina, según han anunciado ambas empresas a través de un comunicado.
Estos dos vehículos de inversión presentaron la semana pasada el concurso voluntario de acreedores ante los Juzgados de lo Mercantil de Madrid, debido a "divergencias entre el sindicato bancario y las compañías", en cuanto "a la vigencia de la financiación" de la deuda, que en la actualidad asciende a 1.627 millones de euros.
La deuda con la que Rivero y Soler se declaran en concurso convierte al proceso en uno de los mayores de la historia empresarial española, por detrás de los de Martinsa-Fadesa, Habitat y Sacresa.
Las compañías solicitaron una ampliación del plazo para resolver una condición vinculada a la refinanciación, algo a lo que una de las 11 entidades financieras acreedoras se negó, siendo necesario un acuerdo unánime, por lo que las sociedades se acogieron al preconcurso de acreedores con fecha 1 de junio.
Las entidades financieras acreedoras son Banco Popular, Bankia, NCG, Royal Bank of Scotland, Caixa Geral, Eurohipo, Sabadell, Liberbank, La Caixa y Banco de Valencia, además de Natixis que, según fuentes del sector, habría sido la entidad que se habría negado a la petición de las familias Rivero y Soler.
La citada refinanciación incluía tres condiciones suspensivas de las cuales dos se cumplieron y la última resultó imposible de ejecutar en el plazo establecido al depender de terceros, han explicado fuentes de Alteco Gestión y de Mag Import, que controlan el 16% y el 15%, respectivamente, de la francesa.
Las acciones de Gecina son las garantías de los créditos
Las dos compañías, que actúan de forma separada, han iniciado medidas similares dado que los créditos, por importe global de 2.160 millones de euros, que recibieron para la compra de acciones en la opa que presentaron sobre Metrovacesa en 2006 (y que posteriormente canjearon por acciones de Gecina) están vinculados desde su inicio.
Desde 2006 y hasta el 31 de mayo de 2012, fecha en el que el sindicato bancario declara vencido su préstamo, ambas compañías habían cumplido "con absoluta puntualidad" el pago de los intereses por importe de 446 millones de euros, de forma que habían reducido el importe inicial en 533 millones, el 25 % del total.
Según han añadido las sociedades de las familias Rivero y Soler, la garantía de los créditos son las propias acciones que poseen en Gecina, cuya valoración "supera el principal de la deuda".
Representantes de ambas firmas han considerado que "es poco entendible en los tiempos actuales que sociedades que están al corriente de pago de sus créditos y cuyas garantías tienen una extrema liquidez, superan el valor de sus créditos y hayan alcanzado un acuerdo de refinanciación, se vean obligadas a presentar concurso por que sólo una de las trece entidades del sindicado no esté de acuerdo".
Fuentes de Metrovacesa, inmobiliaria que controla un 27% de Gecina, se han mostrado preocupados por la evolución en bolsa que pueda tener Gecina en los próximos días, según cita Efe, al tiempo que han explicado que estarán a la espera para ver cómo se desarrollan los aspectos jurídicos de la situación.