La abstención y la fragmentación amenazan las novenas elecciones gallegas del 21-O

• Las encuestas vaticinan una alta abstención y la fragmentación del Parlamento
• Alberto Núñez Feijóo se enfrenta a su reválida tras el adelanto electoral
• Pachi Vázquez se presenta como la alternativa a las políticas actuales
• La entrada en escena de AGE puede arrebatar votos al BNG
• Sigue el especial de elecciones gallegas 21-O

Últimas horas antes del inicio de la campaña electoral de las elecciones gallegas

Más de 2,5 millones de gallegos -2.696.513, según del censo electoral- han sido convocados a las urnas el 21 de octubre, en las que serán sus novenas elecciones autonómicas, desde que en 1981 fuera aprobado el Estatuto de Autonomía de la región.

Los gallegos deberán decidir si refrendan el Gobierno del 'popular' Alberto Núñez Feijóo, que repite candidatura a la presidencia, en una difícil situación económica que marca la agenda de todos los partidos.

La abstención y la fragmentación se erigen como la gran amenaza de los comicios gallegos, según encuestas realizadas por diversos medios de comunicación.

La abstención oscilaría entre el 44 y el 45% y el fin del dominio de los tres partidos tradicionales -PP (Alberto Núñez Feijóo), PSdeG (Pachi Vázquez) y BNG (Francisco Jorquera)-, que dominan el hemiciclo gallego desde hace dos décadas, se verá afectado por la entrada en escena de otros partidos minoritarios con muchas posibilidades de hacerse con representación.

Desde que en 1992, el por entonces presidente de la Xunta, Manuel Fraga, subiera el porcentaje necesario para obtener representación en el parlamento gallego -elevó del 3% al 5% el mínimo necesario para lograr escaño- los partidos minoritarios se han visto relegados al ostracismo, algo que puede cambiar este 21-O.

La escisión del BNG

La escisión que protagonizó el BNG a comienzo de año tiene mucho que ver con el futurible mapa electoral de Galicia. Tras el batacazo del partido de Francisco Jorquera en las últimas elecciones generales, que dejó al BNG muy debilitado.

De hecho, la consecuencia fue el nacimiento de dos nuevas formaciones que pueden arañar varios escaños al BNG. ANOVA, del histórico dirigente Xosé Manuel Beiras, y Compromiso por Galicia -encabezado por Xoan Bascuas-, son las dos nuevas formaciones nacidas de las disensiones internas de los nacionalistas gallegos.

Predominio histórico de PP, PSdeG y BNG

Del predominio tradicional de PP, PSdeG y BNG, el adelanto de los comicios -previstos para comienzo de año- al nuevo retrato donde hasta siete formaciones pueden repartirse los 75 escaños en juego.

UPyD, de Xosé Canedo, SCD -el nuevo partido del exbanquero Mario Conde-, Alternativa Galega de Esquerdas (AGE) -la coalición surgida de ANOVA y EU y EQUO- y Compromiso por Galicia aspiran a acabar con el hegemonía de los tres clásicos.

Las encuestas sobre intención de voto publicadas por la Razón y la Voz de Galicia coinciden en resaltar el alto índice de abstención, que se situaría entre el 44 y 45%, casi 10 puntos por encima de los comicios de 2009.

Esa abstención podría castigar la mayoría absoluta del PP, que perdería entre uno y cuatro escaños respecto a sus 38 actuales. No perjudicaría demasiado al PSdG, que mantendría sus 25 sitios y sumiría al BNG en su peor resultado democrático, que pasaría de los 12 a los 10, según la radiografía de voto realizada por La Razón.

Mientras, los sondeos de La Voz de Galicia otorgan de nuevo la mayoría absoluta al actual presidente de la Xunta, con un escaño más que en los pasados comicios, en detrimento del PSdeG, que se quedaría con 24 y coincide en destacar el desastre electoral del BNG, que cedería tres escaños a favor de la nueva formación dirigida por Beiras.

El voto exterior puede ser determinante

Del total de 2.696.513 de electores que decidirán el futuro de Galicia el próximo día 21 de octubre, 1.088.343 votarán por A Coruña, 893.524 por Pontevedra, 363.868 por Ourense y 350.778 por Lugo, las cuatro provincias que componen Galicia.

Aunque se podría decir que la region cuentan con una quinta provincia en ultramar, que será decisiva en los resultados y reparto posterior de la tarta parlamentaria.

De los más de dos millones y medio de gallegos con derecho a voto, 397.284 residen en el extranjero, su mayor parte en Sudamérica, concentrados gran parte de ellos, en Argentina -141.68-.

Pero la sombra de la abstención también amenaza al electorado fuera de las fronteras españolas. El cambio en la legislación electoral del año pasado, que impuso el voto por correo o rogado, hace que se espere un bajo porcentaje de participación .

Posibles escenarios electorales

Feijóo se enfrenta a una reválida, como él mismo dijo tras la convocatoria adelantada de comicios, en la que aseguró que el 21-O no debe plantearse como "un plebiscito a las políticas de Rajoy", sino como "un examen a su labor".

En caso de que la alta abstención esperada y el surgimiento en el panorama electoral del nuevo partido de Conde, como formación alternativa al centro-derecha, le relegue de la mayoría absoluta obtenida en 2009, el actual presidente de la Xunta dejó entrever en una televisión gallega que no pactaría con Sociedad Civil y Democracia.

De no lograr los 38 escaños necesarios para refrendar su mayoría, Feijóo tendría que optar por un Gobierno en minoría, si las otras formaciones como PSdeG, BNG y el nuevo AGE no optasen por un tripartito de Gobierno, de lograr los escaños necesarios.

Los socialistas de Vázquez están entre los 24 y 25 escaños, lo que le permitiría poder repetir los resultados de hace tres años.

El dirigente del PSdeG afronta sus primeros comicios como candidato a la presidencia de la Xunta de Galicia, el anticipo de los comicios evitó las primarias -previstas para el 6 de octubre- y fue secundado en el Comité Nacional del PSdeG-PSOE.

Quien más tiene que perder el 21-O es el BNG de Jorquera, que se verá perjudicado por la fuga de votantes a las dos nuevas formaciones de Beiras (AGE) y Xoán Bascuas (Compromiso por Galicia).

Precisamente, la coalición que ha hecho el histórico dirigente nacionalista con EU -la filial de Izquierda Unida en Galicia- y EQUO, representa el mayor peligro de pérdida de escaños para el BNG, que podría encontrarse con su peor resultado electoral desde su creación en 1982.

UPyD aspira a mejorar los resultados electorales de 2009, cuando cosecharon algo más de 19.000 votos, lo que les dejó muy alejados de 5% necesario para lograr representación en el Parlamento gallego.

Los dos partidos, de los siete favoritos, que menos opciones tienen de lograr escaño con SDC de Mario Conde, que luchará por intentar rascar algún escaño al PP como alternativa del centro derecha, y Compromiso por Galicia, que tiene muy complicado hacerse hueco entre el BNG y AGE como alternativa nacionalista en el mapa electoral.

La corrupción salpica a PSOE y PP antes de las elecciones

A falta de un mes para que los electores gallegos decidiesen su intención de voto y antes de que arrancase la campaña electoral,  la corrupción volvió a salpicar a los dos grandes partidos con la detención del alcalde socialista de Ourense, Francisco Rodríguez,  y al edil 'popular' de Boqueixón, Adolfo Vázquez, en el marco de la 'Operación Pokemon'.

Ambos están imputados, junto a otras once personas, en la operación que se ha denominado 'Pokemon', por diversos delitos como los de cohecho, prevaricación, fraude fiscal, falsedad documental o tráfico de influencias relacionados con adjudicaciones de obras.

El alcalde de Lugo, Xosé Clemente Orozco, del PSOE, también tuvo que declarar como imputado dentro de la 'Operación Campeón', tras la declaraciones de Jorge Dorribo, que le relacionaba con la trama de corrupción, causa, que finalmente fue archivada por la juez del caso.

El pasado 25 de marzo se celebraron las elecciones autonómicas andaluzas, que se vieron marcadas por el caso de los ERE fraudulentos, otro caso de corrupción política que marcó la campaña electoral.