El juez deja libre a una de las Pussy Riot pero mantiene la condena de dos años a las otras dos
- La liberada es Yekaterina Samutsévich, que había cambiado su defensa
- Sus otras dos compañeras tendrán que pasar dos años en un campo detrabajo
- Una de ellas reta a Putin públicamente entre risas de la sala
El Tribunal Municipal de Moscú ha dejado este miércoles en libertad condicional a Yekaterina Samutsévich, una de las tres integrantes del grupo punk Pussy Riot condenadas a dos años de prisión por cantar en el principal templo de la Iglesia Ortodoxa Rusa.
Mientras, ha mantenido la sentencia de cárcel a las otras dos jóvenes del grupo, Nadezhda Tolokónnikova y María Aliójina, condenadas por "gamberrismo motivado por odio religioso", delito del que las tres se declaran inocentes, según las agencias rusas.
Samutsévich, que cambió la pasada semana de abogados, saldrá libre del juzgado que veía el recurso contra la condena, mientras que sus compañeras deberán cumplir la pena en un campo de trabajo.
"El tribunal estima que Samutsévich puede enmendar su conducta sin ser aislada de la sociedad", ha declarado a los periodistas la portavoz oficial de la instancia judicial, Anna Usacheva.
El proceso de apelación empezó el 1 de octubre pero el tribunal suspendió la vista después de que Samutsévich anunciase que se separaba de sus abogados al estar en desacuerdo con la línea de defensa adoptada.
Diferentes estrategias de defensa
La nueva abogada de la mujer liberada, Irina Jrunova, ha explicado los motivos que en su opinión llevaron a la liberación de su defendida: "Tan solo le hemos enseñado al tribunal su papel en la actuación (en la catedral de Cristo Salvador de Moscú)".
"En 15 segundos no le dio tiempo a hacer nada. El tribunal atendió nuestros argumentos", ha agregado.
El defensor de las otras dos condenadas, Mark Feiguín, ha asegurado a la salida del juzgado que recurrirá tanto la condena a prisión como la resolución del Tribunal de Moscú sobre el recurso.
"Seguiremos recurriendo esta decisión ante la instancia que corresponda y ante el Tribunal de Estrasburgo", ha indicado Feiguín.
El letrado no entiende "porqué diferenció el tribunal las acciones de las integrantes de las Pussy Riot". "Nos alegramos por la liberación de Samutsévich, pero teníamos derecho a esperar la liberación de las tres chicas", ha añadido.
En el juicio Samutsévich ha declarado que no quería ofender a los creyentes, hablando desde un habitáculo acristalado como sus dos compañeras.
"Si ése es el caso, nos disculpamos. Nuestra acción era política y debo responder por lo que hice", ha añadido dirigiéndose al tribunal de manera relajada, con las manos en los bolsillos.
Por su parte, Aliójina ha reclamado, como su compañera, que se anule el juicio en primera instancia y que queden en libertad y ha subrayado que son inocentes y que están en la cárcel por sus opiniones políticas.
La tercera en discordia, Nadezhda Tolokónnikova, ha declarado por su parte que stá dispuesta a presentar excusas si ha ofendido a la gente pero "un arrepentimiento es imposible si supone reconocer que nuestra acción era antirreligiosa, que no es el caso".
Críticas a Putin
Aliójina ha recordado también las recientes declaraciones del presidente Putin en las que se pregunta sobre el significado del nombre Pussy Riot.
"El presidente considera que el nombre de nuestro grupo es indecente, yo se lo quiero traducir: es la revuelta de los coños. Esto no es más indecente que sus llamamientos a lanzar a sus enemigos a los retretes", ha declarado la cantante entre risas de la sala y las protestas de los jueces, que la han interrumpido.
La acusada hacía referencia a una declaración hecha hace varios años por Putin respecto a los rebeldes chechenos.
"Si nuestra condena se confirma y tenemos que irnos a un campamento de trabajo, no nos vamos a dar por vencidas, aunque nos envíen a Siberia o a Mordovia", ha añadido Aliójina
Putin estimó el pasado domingo que la condena a las jóvenes era "correcta". "Era lo que querían y lo tienen", defendió ante la cadena de televisión oficialista NTV, donde aseguró que no tenía "nada que ver" con el asunto.
Durante la vista del recurso, Feiguín pidió a la magistrada que que valore las presiones ejercidas sobre la Justicia por el presidente, Vladímir Putin, pero el tribunal no atendió esa petición.
"Pido un pronunciamiento particular que señale al presidente de Rusia (Vladímir) Putin que es inadmisible la injerencia en la decisión del tribunal de casación",ha declarado.
Este domingo, con ocasión de su 60 cumpleaños, el líder ruso en una entrevista por la televisión aseguró: "Las llevaron al tribunal, les metieron un par de años"
El caso de las Pussy Riot divide a la sociedad rusa y provoca indignación en todo el mundo en un contexto de inquietud sobre el posible recorte de libertades ante la vuelta al Kremlin de Putin en un tercer mandato como presidente tras un intermedio obligado de cuatro años como primer ministro, en el que su aliado y ahora primer ministro, Dimitri Medvédev, fue el presidente.
Las jóvenes han continuado recibiendo señales de apoyo del extranjero tras su condena, como la votación del Parlamento Europeo que les ha colocado como finalistas para el Premio Sajarov o las muestras de apoyo de la premio Nobel brimana Aung San Suu Kyi y la viuda de John Lennon, Yoko Ono.